Patatas rellenas de ternera, cocinadas con ranas, con milhoja y berenjena, rebozadas con salsa y de múltiples formas originales. Son las tapas que ofertan 25 negocios de Xinzo y que los clientes votan para optar al Salón Monográfico de la Patata.
¿Dónde sirven las tapas de concurso?, preguntan foráneos que se acercan hasta Xinzo. Los 25 establecimientos que compiten (hasta el 15 de octubre) para estar presentes en el Salón Monográfico de la Patata se encargan de proporcionar los folletos de los bares y restaurantes donde se pueden degustar y, también, votar. Y es que cada uno de los establecimientos cuenta con urnas y talones para que los clientes puntúen las tapas (de cero a 10).
Las tapas tiran y comienzan a generar movimiento en la villa, aunque no todos los negocios han echado a rodar la cocina. Yo las tengo incluidas en la carta a diario. Cuando me las piden, las sirvo, pero como no se fijó un día determinado, hay algunos algunos negocios participantes que no las tienen disponibles, según comentan los visitantes, comenta el hostelero Salvador Palomanes Mesa, que oferta patatas o chisqueiro, es decir, rebozadas y con una sala especial ligeramente picante.
No obstante, señala que como es la primera vez, es comprensible, acaba de empezar y quedan tres meses por delante. Y destaca que el resultado del concurso es lo de menos, lo importante es la promoción del tubérculo.
Javier Diz, de O Peto da Limia, brinda patacas con rás, una tapa que despierta curiosidad, principalmente entre los visitantes. La receta es de mi abuela, de hace 30 años. El problema es que en Galicia está prohibido cazar ranas y las compro congeladas, procedentes de países asiáticos y Turquía. Explica que, en los primeros días del concurso, la tapa ha sido muy solicitada y votada: A veces suscita recelos, pues a algunos las ranas les da recelo y a otros les encanta, pero lo importante es fomentar la patata de nuestra tierra de forma original y está despertando interés entre la gente.
Sonia Gil, del Hotel Xinzo, oferta patatas rellenas de ternera gallega, una tapa que servimos cuando la piden. Ayuda a dar a conocer la patata.
Las tapas tiran y comienzan a generar movimiento en la villa, aunque no todos los negocios han echado a rodar la cocina. Yo las tengo incluidas en la carta a diario. Cuando me las piden, las sirvo, pero como no se fijó un día determinado, hay algunos algunos negocios participantes que no las tienen disponibles, según comentan los visitantes, comenta el hostelero Salvador Palomanes Mesa, que oferta patatas o chisqueiro, es decir, rebozadas y con una sala especial ligeramente picante.
No obstante, señala que como es la primera vez, es comprensible, acaba de empezar y quedan tres meses por delante. Y destaca que el resultado del concurso es lo de menos, lo importante es la promoción del tubérculo.
Javier Diz, de O Peto da Limia, brinda patacas con rás, una tapa que despierta curiosidad, principalmente entre los visitantes. La receta es de mi abuela, de hace 30 años. El problema es que en Galicia está prohibido cazar ranas y las compro congeladas, procedentes de países asiáticos y Turquía. Explica que, en los primeros días del concurso, la tapa ha sido muy solicitada y votada: A veces suscita recelos, pues a algunos las ranas les da recelo y a otros les encanta, pero lo importante es fomentar la patata de nuestra tierra de forma original y está despertando interés entre la gente.
Sonia Gil, del Hotel Xinzo, oferta patatas rellenas de ternera gallega, una tapa que servimos cuando la piden. Ayuda a dar a conocer la patata.
