El Ourense sufrió la segunda derrota de la temporada como local al caer por 1-2 ante un Sporting de Gijón B que no necesitó de alardes para ser mejor que un CDO de nuevo sin intensidad defensiva que facilitó la remontada de los de Mareo después del gol en el minuto 6 de Iker Alegre. Sólo dos después igualó Alberto, y Jony, el mejor del partido, sentenció en el 68 después del enésimo regalo local.
El CDO se cansó, vaya que sí se cansó, pero sacó muy poco provecho a su esfuerzo. Hizo e intentó muchas cosas, pero ninguna fructificó. Muy flojo en defensa, nulo en la parcela creativa y con escasa claridad en ataque. El partido para el Ourense se resume así.
El Sporting B, que empezó muy asustadizo, fue creciendo y ganando presencia en ataque a medida que la figura del centrocampista Jony se fue agigantando.
Lo mejor para los de José Luis Míguez 'Luisito' llegó casi al principio. Iker Alegre recibió en el lateral izquierdo, cogió camino al pico del área y soltó un zurdazo que sorprendió por el palo corto al meta Dennis (1-0, minuto 6).
Y lo peor de los locales también comenzó a relucir muy pronto. Córner tras el 1-0, cabezazo de un filial libre sin marca en el centro del área y el balón llega plácido al otro lado del área, donde en boca de gol remacha el lateral Alberto (1-1, minuto 8). El segundo visitante fue todavía más surrealista: error ourensanista en la salida del balón cerca del círculo central, roba Jony para encarar la meta de Pato y batirle de remate cruzado (1-2, minuto 68).
El equipo local nunca fue dueño del balón y por ello los acercamientos al área visitante llegaban en acciones en las que el balón pasaba desde los centrales o laterales hasta las bandas buscando a Borja Valle e Iker Alegre. El primero estuvo mejor en la segunda mitad pero sus intentos cayeron en saco roto. Y es que el CDO tuvo muy pocas llegadas con peligro: Valle cabeceó a las manos de Dennis en el 32, y la más clara, un remate desde fuera del área de Javi Hernández que se estrelló en el palo en el 60.
Al final incluso pudo hacer más sangre el Sporting B, pero salió a relucir la figura del meta Pato, que regresó a O Couto. Dos paradones suyos evitaron que la derrota local fuera más amplia. Al final, 1-2
