Segunda victoria consecutiva del equipo ourensano, que reduce la desventaja con el Alcázar, próximo rival el miércoles en el Paco Paz (67-77)

El COB se aferra a la esperanza

El local Romá Bas fuerza la penetración ante la defensa del alero del COB Salva Arco. (Foto: j.c. cordovilla)
Fructífera jornada para el Aguas de Sousas COB en la LEB Oro. El equipo de Rafa Sanz logró una valiosa victoria en Pamplona y redujo la distancia en la clasificación con respecto al Alcázar, próximo rival el miércoles en el Paco Paz, a dos victorias, mientras el Palencia ganó en Cáceres y se mantiene a tres.
La situación del Sousas COB ha pasado de crítica a complicada. Continúa el último en la Liga, pero su juego y el declive del equipo de Ciudad Real, derrotado en casa por el Breogán, permiten un halo de esperanza en la lucha por eludir el descenso directo.

Jugó, compitió y ganó el equipo de Rafa Sanz en la pista del equipo sorpresa de la temporada, el Basket Navarra. Desarrolló una magnífica defensa (sólo permitió 11 puntos en el primer cuarto), mostró una gran actitud y estuvo inspirado desde el exterior. Cárdenas, Fergerson, Arco, Galarreta y Brown se conjuraron para marcar 60 de los 77 puntos ourensanos, con un notable 47 por ciento en triples y 83 en tiros libres.

Sólo faltó el acompañamiento de los pivots. Coego fue el más productivo en líneas generales. Kale, Starosta y Onyekwe colaboraron en defensa pero no respondieron en ataque, y a ratos en el rebote, permitiendo el acercamiento más próximo del rival, 25-27 en el minuto 17. Ahí demostró el COB su mejoría, asumiendo la responsabilidad y respondiendo con canastas de autoridad.

Arco al comienzo, cerrando con un triplazo con el sonido de la bocina al final de la primera parte; Galarreta, regular todo el partido; Fergerson, tocado con una varita, autor de 19 puntos en 22 minutos; Brown, mariscal de campo y anotador cuando fue necesario... El COB dominó el partido con ventajas de entre 16 y 7 puntos, matando cualquier reacción local.

El equipo de Rafa Sanz aún respira y tiene oxígeno para dar más de un susto. La visita del Alcázar solventará muchas dudas.

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