El Aguas de Sousas encajó en Prat la primera derrota desde la llegada de Rafa Sanz al banquillo. En su mejor partido a domicilio, el COB encajó la primera derrota. ¡Qué curioso!
El equipo ourensano dominó en el marcador durante la mayoría de minutos, dio un paso al frente en consistencia defensiva, jugó con regularidad y equipo y además evitó los alarmantes bajones de citas preferentes. Lecturas muy positivas que sin embargo no tuvieron recompensa. ¿Por qué?
Rafa Sanz coincide en el paso al frente dado por su equipo pero tiene muy claro en qué fallaron, por qué perdieron: 'Me gustó el equipo, jugamos con coherencia y fuimos un equipo serio pero nos faltó saber cerrar nuestra zona y tener más paciencia en ataque. Mejorando esas dos cosas habríamos ganado, pero aun así a nadie hubiese sorprendido que lo hubiésemos hecho tal y como fue el partido'.
El entrenador cordobés lamentó la falta de contundencia del COB en los minutos finales. Un pecado capital cuando enfrente hay un rival del mismo pesaje y una lección que no debería caer en saco roto pensando en citas ya próximas: 'Fue un partido de play off y por momentos fuimos un poco hermanitas de la caridad en defensa. Eso no se puede permitir ante un equipo con tanto nivel como el Prat. Fuimos un equipo serio pero nuestras aspiraciones tienen que ser mayores, tenemos que ser más atrevidos. Cuando queda un tercio de competición todos los partidos son muy complicados porque todo el mundo se juega algo y la necesidad de ganar es doble. No podemos diferenciar entre los partidos ante Andorra y Prat o los de Gandía o Tenerife. No hay partidos imposibles pero tampoco los hay fáciles'.
Al Aguas de Sousas le quedan cinco partidos por disputar en la Liga regular y los cálculos para intentar asegurar el factor pista en la primera ronda de play off son todavía imprevisibles. 'Hay otros equipos que entran en juego. No podemos pensar en eso', asegura Sanz. El objetivo del equipo ourensano, al menos de su técnico, se centra más en mirarse el ombligo y menos la clasificación: 'El objetivo es mejorar nuestro juego día a día y creo que todavía estamos al 50 por cien de lo que podemos dar'. Y énfasis en el trabajo menos vistoso: 'Todo a nivel defensivo es mejorable. El equipo que quiera ascender no puede ser una hermanita de la caridad en defensa'.
BUENAS SENSACIONES
El trabajo diario y la evolución colectiva gustan a Rafa Sanz. El entrenador es optimista pero pone el listón a la altura que pretenda su plantilla: 'Tenemos un equipo con posibilidades, tenemos tantas posibilidades como cualquier otro equipo pero dependerá de lo que queramos hacer. Dependerá de nuestra ambición'.
El domingo ante el Andorra tendrá el COB un buen test para confirmar su buen nivel ante 'el mejor equipo de la Liga, pero tenemos que hacer lo mismo y seguir dando pasos hacia adelante'.
Rafa Sanz coincide en el paso al frente dado por su equipo pero tiene muy claro en qué fallaron, por qué perdieron: 'Me gustó el equipo, jugamos con coherencia y fuimos un equipo serio pero nos faltó saber cerrar nuestra zona y tener más paciencia en ataque. Mejorando esas dos cosas habríamos ganado, pero aun así a nadie hubiese sorprendido que lo hubiésemos hecho tal y como fue el partido'.
El entrenador cordobés lamentó la falta de contundencia del COB en los minutos finales. Un pecado capital cuando enfrente hay un rival del mismo pesaje y una lección que no debería caer en saco roto pensando en citas ya próximas: 'Fue un partido de play off y por momentos fuimos un poco hermanitas de la caridad en defensa. Eso no se puede permitir ante un equipo con tanto nivel como el Prat. Fuimos un equipo serio pero nuestras aspiraciones tienen que ser mayores, tenemos que ser más atrevidos. Cuando queda un tercio de competición todos los partidos son muy complicados porque todo el mundo se juega algo y la necesidad de ganar es doble. No podemos diferenciar entre los partidos ante Andorra y Prat o los de Gandía o Tenerife. No hay partidos imposibles pero tampoco los hay fáciles'.
Al Aguas de Sousas le quedan cinco partidos por disputar en la Liga regular y los cálculos para intentar asegurar el factor pista en la primera ronda de play off son todavía imprevisibles. 'Hay otros equipos que entran en juego. No podemos pensar en eso', asegura Sanz. El objetivo del equipo ourensano, al menos de su técnico, se centra más en mirarse el ombligo y menos la clasificación: 'El objetivo es mejorar nuestro juego día a día y creo que todavía estamos al 50 por cien de lo que podemos dar'. Y énfasis en el trabajo menos vistoso: 'Todo a nivel defensivo es mejorable. El equipo que quiera ascender no puede ser una hermanita de la caridad en defensa'.
BUENAS SENSACIONES
El trabajo diario y la evolución colectiva gustan a Rafa Sanz. El entrenador es optimista pero pone el listón a la altura que pretenda su plantilla: 'Tenemos un equipo con posibilidades, tenemos tantas posibilidades como cualquier otro equipo pero dependerá de lo que queramos hacer. Dependerá de nuestra ambición'.
El domingo ante el Andorra tendrá el COB un buen test para confirmar su buen nivel ante 'el mejor equipo de la Liga, pero tenemos que hacer lo mismo y seguir dando pasos hacia adelante'.
