La enfermería del Celta rebosa

Los problemas aumentan en el Celta con el paso de las semanas. Un día son los malos resultados, otros los errores arbitrales, luego la falta de puntería y, ahora, las lesiones. En los últimos tiempos la enfermería del equipo vigués se ha ido llenando hasta casi rebosar tras la contractura en el gemelo de su pierna derecha que ayer sufrió Dani Abalo. El arousano tuvo que retirarse del entrenamiento antes de tiempo tras recibir un golpe por detrás. Esta misma tarde será sometido a una ecografía para determinar si sufre o no una rotura fibrilar. En caso de que sea así, no podría jugar el sábado en Cádiz y, dependiendo de la gravedad, tampoco en los siguientes partidos del equipo. Pero Abalo no es el único. Con él, son ocho los futbolistas celestes que figuran en el parte médico. Esto es, un tercio de la plantilla, compuesta por 24 hombres. De este modo, Eusebio Sacristán sólo tenía ayer a dieciséis jugadores del primer equipo a su disposición, por lo que mañana tendría que completar la convocatoria con dos hombres del filial si no recupera a ninguno de los damnificados. En principio, parece difícil que Dani Abalo pueda ser de la partida y cinco de sus compañeros serán baja ante el Cádiz: Borja Oubiña, Aarón Ñíguez, Sergio Ortega, Danilo y Edu Moya, aunque este último no cuenta para el club en cualquiera de los casos. Por lo tanto, las esperanzas celestes se centran en los dos que son duda: Vasco Fernandes y Michu. A principios de semana, la presencia de ambos en la lista para Cádiz parecía segura. Sin embargo, ayer tampoco se entrenaron y cuando sólo faltan dos sesiones para viajar a la localidad andaluza nadie puede asegurar que vayan a estar presentes en el importante compromiso en la ‘Tacita de Plata’. Vasco sufre un proceso febril del que aún no se ha recuperado y Michu padece un esguince en su tobillo derecho que por ahora no le ha permitido ejercitarse con el grupo. Así las cosas, el día se antoja decisivo para calibrar el estado de estos dos futbolistas, así como para saber cuál es el grado de la lesión de Dani Abalo, quien en cualquier caso no trabajará por la mañana, ya que la prueba a la que será sometido es por la tarde. En el mejor de los supuestos, Eusebio sólo tendrá a diecinueve hombres a su disposición, aunque lo más lógico es pensar que serán diecisiete o dieciocho.


Eusebio Sacristán tiene a sólo dieciséis jugadores disponibles, a la espera de los resultados de Dani Abalo (baja casi segura) y de la evolución de Vasco y Michu. La defensa es la línea con menos problemas, ya que el técnico celeste cuenta con seis hombres: Botelho, Roberto Lago, Hugo Mallo, Noguerol, Jordi y Catalá. Sin embargo, tanto la medular como la delantera están más justas, por lo que Eusebio podría tirar de un centrocampista y un atacante del filial. Los candidatos serían Pablo Lede, internacional en las categorías inferiores, y Toni, que ya ha jugado varios partidos con el primer equipo esta temporada. Y es que el Celta sólo tiene a día a cuatro medios (Trashorras, Bustos, Garai y Jonathan Vila) y cuatro atacantes (Joselu, Aspas, Arthuro y Saulo) para cubrir seis posiciones. Lo que es seguro es el once por el que Eusebio apostó ante el Villarreal B cambiará. No sólo por el bajo rendimiento del equipo en ese encuentro, sino por bajas casi confirmadas como la de Abalo, que fue titular el sábado pasado. En su lugar, jugaría el brasileño Saulo. Por otro lado, es previsible que el técnico de La Seca vuelva a contar con López Garai. El mediocentro vasco venía siendo titular en las últimas jornadas, pero se perdió el encuentro ante el segundo equipo del ‘submarino amarillo’ por acumulación de amonestaciones. En caso de que Michu tampoco pueda ser finalmente de la partida, las opciones pasan por adelantar la posición de López Garai y mantener a Cristian Bustos en el equipo o bien otorgarle la titularidad a Jonathan Vila, ya recuperado.