Llegó el gran día. Viana do Bolo se vistió de gala para recibir el Domingo Gorgo, su desfile de fuliones y carrozas y su LII Festa da Androlla. Uno de los días más representativos del Entroido llegó al municipio vianés acompañado de cientos de turistas que se acercaron hasta el lugar para disfrutar junto a los oriundos.
El Fulión do Tameirón, seguido de la agrupación de Grixoa fueron los encargados de abrir el desfile a las 11,30 horas. Casi cuatro horas después, era el Fulión de Fradelo el encargado de poner el punto final al recorrido en el que participaron un total de 23 agrupaciones. Entre ellas, el Fulión do Cabo da Vila, Fornelos de Cova, Punxeiro, Fornelos de Filloás, Quintela do Pando, Grixoa o la Asociación Xuntos polo Fulión de Vilariño de Conso.
Tras el espectáculo, llegó el momento del banquete y como lleva haciéndose desde hace más de medio siglo, la androlla se convirtió en la reina de la mesa. Divididos los comensales entre el Pabellón Municipal y el Campo da Feira, fueron casi 3.000 los comensales que disfrutaron de este manjar.
Un rico consomé calentaba el cuerpo para dar paso al embutido por excelencia de este concello del Macizo Central. Acompañada de lacón, chorizo, grelos y patatas, la androlla afinó el paladar de los allí presentes. Tras ella, cordero asado de los ganaderos de la zona acompañado de ensalada y bica junto a los chupitos y el café finalizaron la comilona.
El festín se alargó hasta bien entrada la tarde para dar paso a la música, y es que la Charanga Mekánica Rolling Band es la encargada de despedir este día “Gordo” en la Plaza Mayor haciendo bailar a vecinos y visitantes.
