Vilariño de Conso amanecía con un sol radiante para celebrar su gran día de Entroido. Desde las 11,30 de la mañana, centenares de personas se congregaban en las calles del lugar para asistir al tradicional desfile de fuliones.
Con la plaza repleta, el fulión de Vilariño de Conso fue el encargado de abrir el desfile acompañado por los boteiros. Tras él, se sucedieron un total de 11 agrupaciones más: Pradoalbar, O Val, San Cristobo-Conso-A Veiguiña, Mormentelos, Carracedo da Serra, Bembibre, Buxán, As Carrelas, Alternativo, Chaguazoso y Manzaneda.
El evento se prolongó hasta bien entrada la tarde y los asistentes, procedentes de todas partes de Galicia, pudieron disfrutar del sonido ancestral de los bombos y el colorido de las máscaras.
“A Terra do folión” no defraudó y un año más la tradición reinó en Vilariño de Conso.
Tras el desfile, llegó el turno de celebrar, un año más, la fiesta gastronómica más emblemática del lugar: la Fiesta del Cabrito. El pabellón municipal y una carpa anexa acogían a los integrantes de los fuliones y a los visitantes, que no dudaron en degustar una carne deliciosa. Con un menú elaborado a base de empanada, chorizo con patatas, cabrito con ensalada, bica y montonico, miles de personas recuperaban de manera presencial la XXXIV edición de esta fiesta.
La troula continuó a lo largo de la tarde-noche al ritmo de la música con la animación de una discomóvil para cerrar así uno de los días más representativos del Don Carnal del Macizo Central.
El lunes, vecinos y visitantes tendrán también una cita en este municipio con la “Festa do porco o espeto”, en la que no faltarán las rondas de fuliones, la buena comida y la música a cargo del Grupo Assia.
