La sorpresa se instaló ayer en la sede nacional del PP al conseguir en Andalucía y en Asturias unos resultados más bajos de lo esperado. La mayor decepción fue la de Andalucía, pues Arenas quedó a cinco escaños de la mayoría absoluta, mientras que en Asturias también aguardaba un mejor resultado, aunque aquí al menos tienen la opción de entrar en el Gobierno si pactan con Cascos.
Pese a todo, la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, recalcó ayer 'la extraordinaria importancia' del triunfo de Javier Arenas y subrayó que el camino del cambio y de reformas de Rajoy sigue siendo 'imparable'.
Cospedal negó que se diese un castigo al Partido Popular en Andalucía y en Asturias, y se manifestó 'absolutamente convencida' de que el cambio político que abandera Rajoy, pese al contenido de algunas reformas y la huelga general del jueves, no se va a detener. Aunque eludió hablar de 'decepción', sí aseguró que 'cuando se ganan unas elecciones', como sucedió en Andalucía, lo normal es que se quiera gobernar.
Por su parte, la vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano, consideró que los resultados en los comicios de ayer en Andalucía y Asturias son 'la mejor prueba' de que desde el 20N se produjo un cambio de tendencia electoral en favor de los socialistas. Según Valenciano, estos resultados son fruto del 'trabajo' realizado por el partido y por sus dos candidatos,Griñán y Fernández, pero son también una muestra 'del fracaso de Rajoy y de sus políticas'.
Valenciano resaltó la mejoría lograda por los socialistas en comparación con las generales del 20 de noviembre.
El coordinador federal de IU, Cayo Lara, descartó que pueda repetirse en Andalucía lo ocurrido en Extremadura, donde la abstención de sus tres diputados permitió un gobierno del PP en esa comunidad, y avanzó que utilizarán sus escaños para que no gobierne el popular Javier Arenas.
Lara se mostró muy contento por los resultados obtenidos en estas elecciones al convertirse en la fuerza clave para gobernar en Andalucía, donde esta formación dobló sus resultados, y haber crecido en Asturias. El líder de la federación cree que los ciudadanos han castigado la política neoliberal del PP y han 'deslegitimado' los recortes sociales y la reforma labor.
Cospedal negó que se diese un castigo al Partido Popular en Andalucía y en Asturias, y se manifestó 'absolutamente convencida' de que el cambio político que abandera Rajoy, pese al contenido de algunas reformas y la huelga general del jueves, no se va a detener. Aunque eludió hablar de 'decepción', sí aseguró que 'cuando se ganan unas elecciones', como sucedió en Andalucía, lo normal es que se quiera gobernar.
Por su parte, la vicesecretaria general del PSOE, Elena Valenciano, consideró que los resultados en los comicios de ayer en Andalucía y Asturias son 'la mejor prueba' de que desde el 20N se produjo un cambio de tendencia electoral en favor de los socialistas. Según Valenciano, estos resultados son fruto del 'trabajo' realizado por el partido y por sus dos candidatos,Griñán y Fernández, pero son también una muestra 'del fracaso de Rajoy y de sus políticas'.
Valenciano resaltó la mejoría lograda por los socialistas en comparación con las generales del 20 de noviembre.
El coordinador federal de IU, Cayo Lara, descartó que pueda repetirse en Andalucía lo ocurrido en Extremadura, donde la abstención de sus tres diputados permitió un gobierno del PP en esa comunidad, y avanzó que utilizarán sus escaños para que no gobierne el popular Javier Arenas.
Lara se mostró muy contento por los resultados obtenidos en estas elecciones al convertirse en la fuerza clave para gobernar en Andalucía, donde esta formación dobló sus resultados, y haber crecido en Asturias. El líder de la federación cree que los ciudadanos han castigado la política neoliberal del PP y han 'deslegitimado' los recortes sociales y la reforma labor.
