Dieciocho personas han sido detenidas en una operación policial llevada a cabo en Navarra, en la que se ha desarticulado un grupo organizado para la distribución de drogas en la Comunidad foral y se han intervenido 30 kilos de hachís, 1.215 dosis de cocaína y unos 9.000 euros.
En la operación 'Orquesta', que ya se ha dado por finalizada, han intervenido agentes de la Policía Municipal de Pamplona y de la Guardia Civil, según ha informado en rueda de prensa el coronel jefe de este último Cuerpo, Benito Salcedo.
En el transcurso de la operación se han realizado doce registros domiciliarios en Pamplona, Estella y Larraga y se ha desmantelado un laboratorio para la producción, elaboración y distribución de marihuana en Bearin.
En ese laboratorio, el 'más importante de este tipo localizado en Navarra', según los investigadores, se realizaban las diferentes labores de cultivo, desde la plantación en semillero de las plantas, hasta su preparación para la venta a pequeña escala. En él se intervinieron 220 plantas, productos químicos y abonos, así como materiales para la distribución de marihuana.
El grupo estaba formado principalmente por ciudadanos marroquíes, argelinos y españoles y estaba 'perfectamente estructurado' para el transporte, recepción, preparación, distribución y venta de la droga en la zona de Tierra Estella y en la cuenca de Pamplona.
El jefe de la organización se trasladaba hasta Marruecos donde compraba el hachís, que luego era introducido en la península en barcas o en coches con doble fondo y conducido hasta Estella donde se almacenaba para su posterior distribución en la Comunidad foral.
A todos los detenidos se les imputa un delito contra la salud pública, según el coronel, quien ha apuntado que dos de ellos estaban relacionados con una operación llevada a cabo por la Guardia Civil en Málaga en la que se requisaron 300 kilos de hachís.
Las dieciocho detenciones han tenido lugar entre el 9 de junio y el 1 de julio y se han llevado a cabo en Pamplona, Estella, Bearin, Berriozar y Larraga.
Entre los efectos intervenidos, además de la droga y el dinero en efectivo, figuran 25 teléfonos móviles, ocho vehículos de alta gama y cuatro básculas de precisión.
El coronel de la Guardia Civil ha resaltado la colaboración con la Policía Municipal de Pamplona, así como la dificultad de la operación debido a que se trataba de un grupo 'bien organizado' que no era fácil de detectar ni de seguir.
En el transcurso de la operación se han realizado doce registros domiciliarios en Pamplona, Estella y Larraga y se ha desmantelado un laboratorio para la producción, elaboración y distribución de marihuana en Bearin.
En ese laboratorio, el 'más importante de este tipo localizado en Navarra', según los investigadores, se realizaban las diferentes labores de cultivo, desde la plantación en semillero de las plantas, hasta su preparación para la venta a pequeña escala. En él se intervinieron 220 plantas, productos químicos y abonos, así como materiales para la distribución de marihuana.
El grupo estaba formado principalmente por ciudadanos marroquíes, argelinos y españoles y estaba 'perfectamente estructurado' para el transporte, recepción, preparación, distribución y venta de la droga en la zona de Tierra Estella y en la cuenca de Pamplona.
El jefe de la organización se trasladaba hasta Marruecos donde compraba el hachís, que luego era introducido en la península en barcas o en coches con doble fondo y conducido hasta Estella donde se almacenaba para su posterior distribución en la Comunidad foral.
A todos los detenidos se les imputa un delito contra la salud pública, según el coronel, quien ha apuntado que dos de ellos estaban relacionados con una operación llevada a cabo por la Guardia Civil en Málaga en la que se requisaron 300 kilos de hachís.
Las dieciocho detenciones han tenido lugar entre el 9 de junio y el 1 de julio y se han llevado a cabo en Pamplona, Estella, Bearin, Berriozar y Larraga.
Entre los efectos intervenidos, además de la droga y el dinero en efectivo, figuran 25 teléfonos móviles, ocho vehículos de alta gama y cuatro básculas de precisión.
El coronel de la Guardia Civil ha resaltado la colaboración con la Policía Municipal de Pamplona, así como la dificultad de la operación debido a que se trataba de un grupo 'bien organizado' que no era fácil de detectar ni de seguir.
