"Le mandé un whatsapp diciéndole 'dame un correo electrónico tuyo para que te mande el documento', me responde con el correo electrónico, se lo mando, en el correo le digo 'a ver si nos podemos ver'..."
El líder de Podemos, Pablo Iglesias, ya no sabe cómo decirle a Pedro Sánchez que quiere hablar con él; le ha mandado un whatsapp, luego un correo electrónico... sin respuesta, y por eso hoy se ha mostrado perplejo porque, dadas las aspiraciones de ambos, "sería normal vernos pasear juntos", ha confesado.
Sus palabras, casi una humilde declaración de amor no correspondido, han sido acogidas con risas y carcajadas por los periodistas que, una vez más, han abarrotado la sala de prensa del Congreso donde ha comparecido para informar de su última reunión con Alberto Garzón, de Izquierda Unida.
Iglesias, que no tiene un pelo de tonto, ha advertido de que aunque sus comentarios sobre sus frustrados contactos con el hoy por hoy único candidato a la investidura no deberían ser noticia, "esto al final se va a convertir en noticia", como fatalmente ha sucedido.
"Le mandé un whatsapp diciéndole 'dame un correo electrónico tuyo para que te mande el documento', me responde con el correo electrónico, se lo mando, en el correo le digo 'a ver si nos podemos ver'...", ha revelado.
"Pero digo yo que si Pedro Sánchez va a ser presidente de un Gobierno del que yo sea vicepresidente sería normal vernos pasear juntos (grandes carcajadas) tener reuniones juntos habitualmente; digo yo que sería lo normal", ha insistido.
Consciente de las risas que provocaban sus palabras, el virtual candidato a vicepresidente de Sánchez ha reconocido que aunque todo este "culebrón" se preste "a la broma", por su parte no va a quedar ya que, siguiendo con el plural mayestático, "tenemos plena disponibilidad a reunirnos desde ya".
Han sido varias las ocasiones en las que ha manifestado su total disposición al añorado encuentro: "sería sensato que Pedro y yo habláramos", "sería muy bueno que el secretario general del PSOE y yo nos reuniéramos", "si quiero presentarle mi documento creo que eso de alguna manera es ineludible, que podamos hablar de las propuestas que hemos hecho", han sido algunas de sus citas.
Porque además, según un argumento en el que insiste desde hace días, sus votantes y los del PSOE también lo quieren.
"Y aunque se rían con el culebrón de te coge el teléfono, te contesta al whatsapp... lo que desearían es vernos reunidos", ha proseguido, aunque entonces ha dado un paso más y ha llegado a reconocer que su reunión podría ser algo más discreta, o secreta: "Con fotos o sin fotos, si lo de las fotos es lo de menos".
Tal vez por eso al final de su rueda de prensa no ha dudado en aseverar que, para desbloquear esta situación que él mismo califica de "kafkiana", ambos deberían conversar "sin fotos, sin selfies ni nada", para trabajar "en el próximo Gobierno de España".
Y como la didáctica nunca está de más, sobre todo si el que habla es un profesor universitario, ha invocado una serie televisiva, y ya no su favorita "Juego de Tronos", sino la danesa Borgen, donde el que gobierna no es ni el primer ni el segundo partido más votado, sino el tercero.
"Se ha puesto muy de moda esta serie y a lo mejor debería ser obligatoria para que todo el mundo vea que hay que hablar, y que hay que reunirse y que eso es muy importante para ponerse de acuerdo", ha manifestado a modo de consejo... o aviso a navegantes.
