'Yo no lo habría hecho así, y así se lo dije al presidente'. Alfredo Pérez Rubalcaba, candidato socialista a la Presidencia del Gobierno, reconoció ante la Ejecutiva del PSOE y ante sus barones que no está de acuerdo con la manera en la que el Gobierno llegó al pacto con el PP para reformar la Constitución y limitar el déficit. Sin embargo, el ex 'número dos' del Ejecutivo señaló que la flexibilidad que él mismo logró introducir al texto final, convierte la medida en 'una vacuna' para prevenir más consecuencias negativas a la economía.
En la reunión de cuatro horas de la Ejecutiva del PSOE, Rubalcaba y José Luis Rodríguez Zapatero, realizaron un total de cuatro intervenciones, dos cada uno. En su turno, el candidato reconoció que habría llevado de otra manera las riendas de la reforma para incluir límites de déficit en la Carta Magna: 'Yo no lo habría hecho así, y así se lo dije al presidente'.
La cita de ayer giró en torno al pacto entre las formaciones de Génova y Ferraz. El ex ministro de Interior explicó que a él le hubiera gustado consultar con calma a la dirección del partido y hacer un debate en profundidad antes de anunciar y llevar al Pleno del Parlamento los cambios constitucionales. Rubalcaba expuso sus reticencias a sus compañeros y afirmó que, 'por responsabilidad', y 'por el estrecho margen' que tenía ante sí, le dijo al presidente: 'Adelante'.
ESTABILIDAD FINANCIERA
El candidato mantuvo que siempre fue más defensor que nadie de la estabilidad financiera y recordó que se había posicionado a favor de unos presupuestos con superávit. El que fuese 'número dos' del equipo de Zapatero explicó que es mejor hacer los cambios ahora, antes de que sea demasiado tarde, informaron las fuentes.
Éstas agregaron que Rubalcaba rechazó la posibilidad de realizar un referéndum, porque este tipo de reformas no lo exige y porque ningún país de la Unión Europea (UE) tuvo que convocar la consulta popular para introducir estos cambios en su Carta Magna.
El jefe del Ejecutivo defendió la inclusión de los límites de déficit en la Constitución por su valor preventivo y recordó que España vivió circunstancias de extrema gravedad a lo largo del mes de agosto por los ataques de los mercados a la deuda pública.
Era necesario rebajar su coste y lanzar un mensaje claro de austeridad y control del gasto público. Zapatero aseveró que el país pide prestado 600 millones de euros diarios y que sólo la Educación cuesta al día 340 millones de euros.
En este día de reuniones, el candidato tuvo una cita vespertina con los barones socialistas, a quienes explicó también los términos del acuerdo de reforma constitucional. Fuentes del PSOE informaron de que Rubalcaba reconoció también en este entorno que 'las cosas se podrían haber hecho mejor' y, a partir de esa premisa, expuso a sus compañeros la labor que desempeñó para que no se introdujesen cifras concretas en la Carta Magna. Sus interlocutores salieron de la reunión más satisfechos; es más, decidieron cerrar filas en torno a su candidato y apoyar el pacto PP-PSOE. Sólo necesitaban 'las explicaciones extensas, concretas y completas' del socialista, según Tomás Gómez, secretario del PSM. 'Cuando las cosas se explican, se entienden', corroboró Guillermo Fernández Vara, su homólogo extremeño.
El candidato tuvo una tercera cita a última hora de la tarde, esta vez, con los miembros de su Grupo Parlamentario en el Congreso y el Senado. Marcelino Iglesias, secretario de Organización del partido, daba por hecho, antes de la reunión, que Rubalcaba conseguiría el respaldo de los oyentes.
CALIFICACIÓN DE MOODY'S
La agencia de calificación crediticia Moody's considera 'positiva' para el perfil de crédito de España la propuesta del Gobierno de introducir en la Constitución una cláusula que limite el déficit de las administraciones y asegura que lo tendrá en cuenta en su análisis del 'rating' soberano (Aa2), aunque advierte de que establecer una regla fiscal no resolverá por sí misma los desafíos fiscales del país.
La cita de ayer giró en torno al pacto entre las formaciones de Génova y Ferraz. El ex ministro de Interior explicó que a él le hubiera gustado consultar con calma a la dirección del partido y hacer un debate en profundidad antes de anunciar y llevar al Pleno del Parlamento los cambios constitucionales. Rubalcaba expuso sus reticencias a sus compañeros y afirmó que, 'por responsabilidad', y 'por el estrecho margen' que tenía ante sí, le dijo al presidente: 'Adelante'.
ESTABILIDAD FINANCIERA
El candidato mantuvo que siempre fue más defensor que nadie de la estabilidad financiera y recordó que se había posicionado a favor de unos presupuestos con superávit. El que fuese 'número dos' del equipo de Zapatero explicó que es mejor hacer los cambios ahora, antes de que sea demasiado tarde, informaron las fuentes.
Éstas agregaron que Rubalcaba rechazó la posibilidad de realizar un referéndum, porque este tipo de reformas no lo exige y porque ningún país de la Unión Europea (UE) tuvo que convocar la consulta popular para introducir estos cambios en su Carta Magna.
El jefe del Ejecutivo defendió la inclusión de los límites de déficit en la Constitución por su valor preventivo y recordó que España vivió circunstancias de extrema gravedad a lo largo del mes de agosto por los ataques de los mercados a la deuda pública.
Era necesario rebajar su coste y lanzar un mensaje claro de austeridad y control del gasto público. Zapatero aseveró que el país pide prestado 600 millones de euros diarios y que sólo la Educación cuesta al día 340 millones de euros.
En este día de reuniones, el candidato tuvo una cita vespertina con los barones socialistas, a quienes explicó también los términos del acuerdo de reforma constitucional. Fuentes del PSOE informaron de que Rubalcaba reconoció también en este entorno que 'las cosas se podrían haber hecho mejor' y, a partir de esa premisa, expuso a sus compañeros la labor que desempeñó para que no se introdujesen cifras concretas en la Carta Magna. Sus interlocutores salieron de la reunión más satisfechos; es más, decidieron cerrar filas en torno a su candidato y apoyar el pacto PP-PSOE. Sólo necesitaban 'las explicaciones extensas, concretas y completas' del socialista, según Tomás Gómez, secretario del PSM. 'Cuando las cosas se explican, se entienden', corroboró Guillermo Fernández Vara, su homólogo extremeño.
El candidato tuvo una tercera cita a última hora de la tarde, esta vez, con los miembros de su Grupo Parlamentario en el Congreso y el Senado. Marcelino Iglesias, secretario de Organización del partido, daba por hecho, antes de la reunión, que Rubalcaba conseguiría el respaldo de los oyentes.
CALIFICACIÓN DE MOODY'S
La agencia de calificación crediticia Moody's considera 'positiva' para el perfil de crédito de España la propuesta del Gobierno de introducir en la Constitución una cláusula que limite el déficit de las administraciones y asegura que lo tendrá en cuenta en su análisis del 'rating' soberano (Aa2), aunque advierte de que establecer una regla fiscal no resolverá por sí misma los desafíos fiscales del país.
