El Aeropuerto de Santiago ha llevado a cabo este miércoles un simulacro de secuestro aéreo a iniciativa de la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) del Ministerio de Fomento, con la participación del Ministerio del Interior, del Ejército del Aire, de Aena y de la Delegación del Gobierno en Galicia.
Los objetivos que se persiguen con este tipo de ejercicios son mantener el entrenamiento del personal involucrado en un suceso de estas características y corroborar la 'idónea implantación de la normativa aplicable al mismo'.
Los trabajos de diseño y planificación del simulacro se realizaron durante el primer semestre del año y el ejercicio se llevó a cabo en el momento en que el aeropuerto estimó que no se producirían interferencias en el normal desarrollo de las operaciones aeroportuarias.
Durante el simulacro, una aeronave, cedida por el Ejército del Aire, despegó de la Base Aérea de Getafe a las 15.30 horas de la tarde del miércoles, simulando un vuelo comercial Madrid-Santiago. En pleno vuelo, el avión con 32 pasajeros a bordo, es secuestrado por dos individuos armados.
Al constatar el controlador aéreo el secuestro, se activaron los protocolos de seguridad pertinentes y se permitió el aterrizaje de la aeronave, que quedó estacionada en la plataforma. A continuación, efectivos de la Guardia Civil establecieron el dispositivo de seguridad oportuno en la zona de posicionamiento de la aeronave, y se convocó el correspondiente Gabinete de Crisis de intervención en secuestros aéreos que estipula la normativa en vigor.
Posteriormente se contactó con los secuestradores para conocer sus pretensiones e iniciar las acciones adecuadas para liberar a los rehenes y recuperar el control de la aeronave. Tras varias horas de negociación, se produjo la intervención del Grupo Especial de Operaciones (GEO) del Cuerpo Nacional de Policía que procedió a realizar el asalto del avión reduciendo a los secuestradores.
Con la liberación de los pasajeros y tripulación, el Subdelegado del Gobierno en A Coruña, Jorge Atán, dio por concluido el ejercicio y se desactivaron los dispositivos de seguridad.
Los trabajos de diseño y planificación del simulacro se realizaron durante el primer semestre del año y el ejercicio se llevó a cabo en el momento en que el aeropuerto estimó que no se producirían interferencias en el normal desarrollo de las operaciones aeroportuarias.
Durante el simulacro, una aeronave, cedida por el Ejército del Aire, despegó de la Base Aérea de Getafe a las 15.30 horas de la tarde del miércoles, simulando un vuelo comercial Madrid-Santiago. En pleno vuelo, el avión con 32 pasajeros a bordo, es secuestrado por dos individuos armados.
Al constatar el controlador aéreo el secuestro, se activaron los protocolos de seguridad pertinentes y se permitió el aterrizaje de la aeronave, que quedó estacionada en la plataforma. A continuación, efectivos de la Guardia Civil establecieron el dispositivo de seguridad oportuno en la zona de posicionamiento de la aeronave, y se convocó el correspondiente Gabinete de Crisis de intervención en secuestros aéreos que estipula la normativa en vigor.
Posteriormente se contactó con los secuestradores para conocer sus pretensiones e iniciar las acciones adecuadas para liberar a los rehenes y recuperar el control de la aeronave. Tras varias horas de negociación, se produjo la intervención del Grupo Especial de Operaciones (GEO) del Cuerpo Nacional de Policía que procedió a realizar el asalto del avión reduciendo a los secuestradores.
Con la liberación de los pasajeros y tripulación, el Subdelegado del Gobierno en A Coruña, Jorge Atán, dio por concluido el ejercicio y se desactivaron los dispositivos de seguridad.
