Las políticas para la emigración sufrirán un fuerte recorte en las inversiones durante el próximo ejercicio si el Gobierno no introduce modificaciones en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado que presentó el pasado sábado el ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro. Por tercer año consecutivo las partidas asignadas a los emigrantes españoles siguen un camino descendente.
De los 116 millones de euros del ejercicio de 2011, se pasó a 89 millones durante este año, para nuevamente meter la tijera y dejarlo en 76 millones de euros para 2013.
Este es el amargo desayuno que les espera mañana al Consejo de Ciudadanía Española en el Exterior, un órgano consultivo que está formado por casi cien miembros, que representan a los emigrantes de todo el mundo. Durante hoy y mañana se reunirán en Santiago para conocer de primera mano el escenario económico al que se enfrentarán durante el próximo ejercicio. Las cifras que les presentará el director general de Migraciones, Aurelio Miras Portugal, no les gustarán porque eliminan programas consolidados y reducen las inversiones en otros. Entre los que se eliminan están los denominados 'asociaciones', proyectos e investigación', 'comunicación' y 'jóvenes y mujeres'. Todos ellos son esenciales para poder mantener actividades culturales y sociales en todo el mundo. Muchos consejeros han mostrado su malestar porque mientras por un lado se intenta potenciar la 'marca España' por otro se olvida a los principales 'embajadores' que tiene el país en el extranjero.
El grueso de los presupuestos, 73 millones de euros, tendrán como destino la atención los emigrantes en situación de dificultad. En este sentido, 69 millones son para prestaciones por razón de necesidad, 2,3 millones para pensiones asistenciales por ancianidad, y 3,4 millones para familias e instituciones sin fines de lucro. El resto de las partidas van destinados al gasto del personal con 1,9 millones de euros; gastos corrientes en bienes y servicios con 1 millón de euros, y pequeñas partidas de 470.000 euros para centros e instituciones asociativas de carácter social, benéfico, cultural y educativo; y 10.000 euros en ayudas para proyectos, iniciativas y acciones dirigidas a españoles en el exterior y retornados.
Pese al esfuerzo en mantener las ayudas a los más desfavorecidos, lo cierto es que el número de beneficiarios es cada vez menor. Si en el año 2011 se pudieron atender a 35.11o beneficiarios por razón de necesidad, este año sólo se podrá atender a 27.000, la misma cifra que está prevista para 2013. Los beneficiarios de pensiones asistenciales por ancianidad también serán menos, de los 1.000 casos presupuestos en el año 2011 se pasa a 590 para 2013.
Este es el amargo desayuno que les espera mañana al Consejo de Ciudadanía Española en el Exterior, un órgano consultivo que está formado por casi cien miembros, que representan a los emigrantes de todo el mundo. Durante hoy y mañana se reunirán en Santiago para conocer de primera mano el escenario económico al que se enfrentarán durante el próximo ejercicio. Las cifras que les presentará el director general de Migraciones, Aurelio Miras Portugal, no les gustarán porque eliminan programas consolidados y reducen las inversiones en otros. Entre los que se eliminan están los denominados 'asociaciones', proyectos e investigación', 'comunicación' y 'jóvenes y mujeres'. Todos ellos son esenciales para poder mantener actividades culturales y sociales en todo el mundo. Muchos consejeros han mostrado su malestar porque mientras por un lado se intenta potenciar la 'marca España' por otro se olvida a los principales 'embajadores' que tiene el país en el extranjero.
El grueso de los presupuestos, 73 millones de euros, tendrán como destino la atención los emigrantes en situación de dificultad. En este sentido, 69 millones son para prestaciones por razón de necesidad, 2,3 millones para pensiones asistenciales por ancianidad, y 3,4 millones para familias e instituciones sin fines de lucro. El resto de las partidas van destinados al gasto del personal con 1,9 millones de euros; gastos corrientes en bienes y servicios con 1 millón de euros, y pequeñas partidas de 470.000 euros para centros e instituciones asociativas de carácter social, benéfico, cultural y educativo; y 10.000 euros en ayudas para proyectos, iniciativas y acciones dirigidas a españoles en el exterior y retornados.
Pese al esfuerzo en mantener las ayudas a los más desfavorecidos, lo cierto es que el número de beneficiarios es cada vez menor. Si en el año 2011 se pudieron atender a 35.11o beneficiarios por razón de necesidad, este año sólo se podrá atender a 27.000, la misma cifra que está prevista para 2013. Los beneficiarios de pensiones asistenciales por ancianidad también serán menos, de los 1.000 casos presupuestos en el año 2011 se pasa a 590 para 2013.
