El alcalde de Santiago de Compostela, Xosé Sánchez Bugallo, pidió la intercesión del Apóstol Santiago para que España tenga acierto para salir de la difícil situación económica actual y recuperar la senda de la creación de empleo potente y sostenido, además de conseguir la victoria del Estado de Derecho y las libertades sobre la barbarie del terrorismo.
En su invocación como delegado regio en la Ofrenda al Apóstol, Sánchez Bugallo solicitó que las políticas sociales primen sobre intereses más poderosos y alertó de que los tiempos de estrechez perjudican más a los menos favorecidos.
Así, reclamó la contribución de todos y en todas las esferas para afrontar problemas y encontrar soluciones, pues la sociedad necesita confianza e ilusión en el futuro, que considera que vendrá dada por la seguridad de no perder los logros sociales conquistados y por la posibilidad de ampliarlo a quienes aún no han podido alcanzarlos.
En su tercera ocasión como delegado regio, Bugallo lamentó que un año más, y ya van demasiados, tenga que denunciar el terrorismo como uno de los obstáculos más graves para la convivencia de la humanidad y aseguró que más pronto que tarde responderán ante la Justicia. Jamás cesaremos en el empeño de soñar con la paz y creemos que el Estado de derecho y libertades vencerá sobre la barbarie, proclamó.
Bugallo también se refirió a aspectos como la inmigración, realidad ante la cual pidió redoblar los esfuerzos de cooperación internacional, además de pedir protección para un colectivo que forma parte de esa población que por su debilidad puede resultar más dañada y, singularmente, para aquellos que caen en las redes de los desaprensivos, que trafican con su desesperación.
Igualmente apuntó la necesidad de una Justicia más eficaz para proteger a la infancia, sobre todo después de que la proliferación de la pederastia y de la pornografía infantil en la red hayan hecho saltar todas las luces de alarma; y de mejorar la situación de las víctimas de la violencia machista, para las cuales solicitó que puedan salir de su jaula y que se acorte el camino que aún separa a la mujer del hombre, puesto que ellas son quienes más sufren la pobreza, la exclusión y el desempleo.
LUCHA CONTRA EL CAMBIO CLIMATICO
El regidor compostelano demandó al Apóstol ayuda también en la lucha contra el cambio climático y la pérdida de la biodiversidad y a creer que los actos individuales son más valiosos de los que imaginamos. Ojalá que dentro de 100 años podamos vivir en un planeta más limpio y armonioso, expresó deseoso.
Sánchez Bugallo, que realizó parte de su intervención en castellano y el resto en gallego, invocó al Santo Patrón para llegar a un punto de equilibrio entre la presencia de nuestra historia e identidad y los cambios que la sociedad demanda.
Así, aunque dijo que la Administración, desde la prudencia y el respeto, debe garantizar el libre ejercicio de cualquier religión y la neutralidad del Estado, siendo esto compatible con el respeto a las tradiciones que forman parte de la historia viva y de la cultura de nuestro país. Es el caso de esta ofrenda, que se realiza cada año desde 1642 dentro de la más absoluta normalidad de la convivencia ciudadana, subrayó.
El alcalde de Santiago también aprovechó para recordar que Compostela se prepara para celebrar el próximo Año Santo 2010 y pidió que este evento siga siendo un ejemplo de diálogo y consenso, en el marco del cual se pueda establecer la comunicación entre culturas y creencias.
La ciudad de Compostela se prepara para hacer honor a tu nombre y por eso te pedimos lucidez, tesón, capacidad de trabajo y altura en los propósitos, y que las infraestructuras comprometidas lleguen a Galicia en los plazos establecidos para continuar dándole al Año Santo la dimensión internacional de la que ya goza, invocó a Apóstol.
A este acto religioso asistieron las principales personalidades de Galicia, entre las que estuvieron el presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño; el delegado del Gobierno en Galicia, Manuel Ameijeiras; la presidenta del Parlamento autonómico, Dolores Villarino; conselleiros socialistas; el presidente del PPdeG, Alberto Núñez Feijóo; miembros de la Corporación municipal de Santiago y otras autoridades. Como es tradicional no hubo representación del BNG.
La Ofrenda Nacional al Apóstol Santiago es una ceremonia que fue instituida en 1643 por Felipe IV y a lo largo de los años se mantuvo la tradición de que reyes, jefes de Estado o personalidades con las más altas responsabilidades invocaran al Patrón de las Españas los beneficios divinos para las tareas humanas.
Así, reclamó la contribución de todos y en todas las esferas para afrontar problemas y encontrar soluciones, pues la sociedad necesita confianza e ilusión en el futuro, que considera que vendrá dada por la seguridad de no perder los logros sociales conquistados y por la posibilidad de ampliarlo a quienes aún no han podido alcanzarlos.
En su tercera ocasión como delegado regio, Bugallo lamentó que un año más, y ya van demasiados, tenga que denunciar el terrorismo como uno de los obstáculos más graves para la convivencia de la humanidad y aseguró que más pronto que tarde responderán ante la Justicia. Jamás cesaremos en el empeño de soñar con la paz y creemos que el Estado de derecho y libertades vencerá sobre la barbarie, proclamó.
Bugallo también se refirió a aspectos como la inmigración, realidad ante la cual pidió redoblar los esfuerzos de cooperación internacional, además de pedir protección para un colectivo que forma parte de esa población que por su debilidad puede resultar más dañada y, singularmente, para aquellos que caen en las redes de los desaprensivos, que trafican con su desesperación.
Igualmente apuntó la necesidad de una Justicia más eficaz para proteger a la infancia, sobre todo después de que la proliferación de la pederastia y de la pornografía infantil en la red hayan hecho saltar todas las luces de alarma; y de mejorar la situación de las víctimas de la violencia machista, para las cuales solicitó que puedan salir de su jaula y que se acorte el camino que aún separa a la mujer del hombre, puesto que ellas son quienes más sufren la pobreza, la exclusión y el desempleo.
LUCHA CONTRA EL CAMBIO CLIMATICO
El regidor compostelano demandó al Apóstol ayuda también en la lucha contra el cambio climático y la pérdida de la biodiversidad y a creer que los actos individuales son más valiosos de los que imaginamos. Ojalá que dentro de 100 años podamos vivir en un planeta más limpio y armonioso, expresó deseoso.
Sánchez Bugallo, que realizó parte de su intervención en castellano y el resto en gallego, invocó al Santo Patrón para llegar a un punto de equilibrio entre la presencia de nuestra historia e identidad y los cambios que la sociedad demanda.
Así, aunque dijo que la Administración, desde la prudencia y el respeto, debe garantizar el libre ejercicio de cualquier religión y la neutralidad del Estado, siendo esto compatible con el respeto a las tradiciones que forman parte de la historia viva y de la cultura de nuestro país. Es el caso de esta ofrenda, que se realiza cada año desde 1642 dentro de la más absoluta normalidad de la convivencia ciudadana, subrayó.
El alcalde de Santiago también aprovechó para recordar que Compostela se prepara para celebrar el próximo Año Santo 2010 y pidió que este evento siga siendo un ejemplo de diálogo y consenso, en el marco del cual se pueda establecer la comunicación entre culturas y creencias.
La ciudad de Compostela se prepara para hacer honor a tu nombre y por eso te pedimos lucidez, tesón, capacidad de trabajo y altura en los propósitos, y que las infraestructuras comprometidas lleguen a Galicia en los plazos establecidos para continuar dándole al Año Santo la dimensión internacional de la que ya goza, invocó a Apóstol.
A este acto religioso asistieron las principales personalidades de Galicia, entre las que estuvieron el presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño; el delegado del Gobierno en Galicia, Manuel Ameijeiras; la presidenta del Parlamento autonómico, Dolores Villarino; conselleiros socialistas; el presidente del PPdeG, Alberto Núñez Feijóo; miembros de la Corporación municipal de Santiago y otras autoridades. Como es tradicional no hubo representación del BNG.
La Ofrenda Nacional al Apóstol Santiago es una ceremonia que fue instituida en 1643 por Felipe IV y a lo largo de los años se mantuvo la tradición de que reyes, jefes de Estado o personalidades con las más altas responsabilidades invocaran al Patrón de las Españas los beneficios divinos para las tareas humanas.
