Una operación perfectamente coordinada permitió a la Policía Nacional dar un golpe a un grupo organizado de radicales gallegos. A la hora del cierre de esta edición eran cuatro los detenidos, todos ellos relacionados con los ambientes independentistas de Vigo, aunque no se descartaban nuevos arrestos.
Además, también fueron registrados tres centros sociales vigueses y otro en Santiago. A dos de los detenidos, que circulaban en un vehículo por la AP-9 en la salida de Padrón (A Coruña), les encontraron diverso material explosivo que se correspondía con el utilizado en los últimos atentados registrados en la comunidad gallega.
Estas dos personas, identificadas como Eduardo Vigo Domínguez, de 26 años, y su novia Jessica Rodríguez, gritaron al ser interceptados, según fuentes consultadas, que eran del Exército Guerrilheiro do Povo Galego Ceive, organización que se dio por desarticulada en 1993 tras la detención de sus principales dirigentes. La pareja era la encargada de entregar los artefactos que transportaban al tercer detenido, Roberto Rodríguez Fiadeya, conocido como 'Teto', de 33 años, que se encontraba en Vigo.
La cuarta persona , de la que no transcendió su identidad, también fue arrestada en la ciudad de Vigo, donde a lo largo de la tarde de ayer fueron llevados a cabo varios registros policiales en locales sociales relacionados con el independentismo gallego. La operación continúa abierta y está siendo coordinada por la Audiencia Nacional y en la misma intervienen efectivos llegados a Galicia desde Madrid y por el cuerpo de Información de la Comisaría de la Policía Nacional en Vigo. Todos los detenidos se encontraban a última hora de ayer en dependencias policiales, donde se les estaba tomando declaración.
SEGUIMIENTO
Las investigaciones se iniciaron hace ya algunos meses. Los agentes comenzaron a seguir muy de cerca los pasos de los supuestos cabecillas de los radicales gallegos, que tienen una de sus bases más activas en Vigo y que cuenta con apoyo en la de Ourense, pero que apenas dispone de infraestructura operativa en la zona norte de Galicia. No en vano, dos de los detenidos cuentan con antecedentes por acciones del llamado terrorismo de baja intensidad practicado en los últimos años por grupos radicales.
En el caso de Roberto Rodríguez fue detenido en el 2001 cuando se encontraba en un puente sobre la A-52 con un coche con varios artefactos incendiarios que pretendía tirar sobre los autobuses de aficionados de la peña Ultra Sur que se dirigía a Balaídos. El otro joven, Eduardo Vigo, también fue detenido por tenencia de explosivos en el 2010 y estuvo relacionado con un extraño episodio en el 2006 cuando fue atendido en el hospital de Santiago de una herida de bala en una pierna. Además, este arrestado es hermano de Santiago Vigo, en prisión acusado de pertenecer a Resistencia Galega.
Entre los principales objetivos de estos independentistas radicales figuran las sedes de formaciones políticas como PSOE y PP y entidades bancarias.
Estas dos personas, identificadas como Eduardo Vigo Domínguez, de 26 años, y su novia Jessica Rodríguez, gritaron al ser interceptados, según fuentes consultadas, que eran del Exército Guerrilheiro do Povo Galego Ceive, organización que se dio por desarticulada en 1993 tras la detención de sus principales dirigentes. La pareja era la encargada de entregar los artefactos que transportaban al tercer detenido, Roberto Rodríguez Fiadeya, conocido como 'Teto', de 33 años, que se encontraba en Vigo.
La cuarta persona , de la que no transcendió su identidad, también fue arrestada en la ciudad de Vigo, donde a lo largo de la tarde de ayer fueron llevados a cabo varios registros policiales en locales sociales relacionados con el independentismo gallego. La operación continúa abierta y está siendo coordinada por la Audiencia Nacional y en la misma intervienen efectivos llegados a Galicia desde Madrid y por el cuerpo de Información de la Comisaría de la Policía Nacional en Vigo. Todos los detenidos se encontraban a última hora de ayer en dependencias policiales, donde se les estaba tomando declaración.
SEGUIMIENTO
Las investigaciones se iniciaron hace ya algunos meses. Los agentes comenzaron a seguir muy de cerca los pasos de los supuestos cabecillas de los radicales gallegos, que tienen una de sus bases más activas en Vigo y que cuenta con apoyo en la de Ourense, pero que apenas dispone de infraestructura operativa en la zona norte de Galicia. No en vano, dos de los detenidos cuentan con antecedentes por acciones del llamado terrorismo de baja intensidad practicado en los últimos años por grupos radicales.
En el caso de Roberto Rodríguez fue detenido en el 2001 cuando se encontraba en un puente sobre la A-52 con un coche con varios artefactos incendiarios que pretendía tirar sobre los autobuses de aficionados de la peña Ultra Sur que se dirigía a Balaídos. El otro joven, Eduardo Vigo, también fue detenido por tenencia de explosivos en el 2010 y estuvo relacionado con un extraño episodio en el 2006 cuando fue atendido en el hospital de Santiago de una herida de bala en una pierna. Además, este arrestado es hermano de Santiago Vigo, en prisión acusado de pertenecer a Resistencia Galega.
Entre los principales objetivos de estos independentistas radicales figuran las sedes de formaciones políticas como PSOE y PP y entidades bancarias.
