La Diputación de Pontevedra estudia incluir en sus Presupuestos para este año la financiación del Plan Provincial de Cooperación (PPC) ante la retirada del Estado.
Hasta ahora, el Estado aportaba el 40 por ciento de este plan. El año pasado, tuvo una dotación para obras en los ayuntamientos pontevedreses de 5,5 millones de euros, de los cuales, la Administración central aportó 2,2 millones; la diputación, dos millones; y los ayuntamientos, 1,3.
El PPC, permitió acometer 78 actuaciones en toda la provincia como obras de saneamiento, abastecimientos, servicios básicos; 69 de ellas en ayuntamientos de menos de 50.000 habitantes.
El presidente del organismo provincial, Rafael Louzán espera concretar esta medida en una junta convocada para el jueves de la próxima semana. Para afrontar ese gasto se recortará el dinero destinado a otras partidas y se redimensionará y adelgazará a la Diputación 'en servicios propios e impropios que ofrece y reduciendo los gastos que soporta'.
Asimismo Rafael Louzán ha anunciado su intención de crear un segundo plan 'que atienda el gasto corriente y las actuaciones prioritarias de los municipios'.
Su cuantía, que se definirá en la citada junta, irá en función de la situación económica de cada ayuntamiento y según las actuaciones preferentes y prioritarias de cada uno de ellos.
'DAR OXÍGENO'
Louzán ha considerado aconsejable crear los dos citados planes para 'dar oxígeno' a los ayuntamientos y ha señalado que la Diputación se convertirá, con esa medida, en 'un auténtico referente de los ayuntamientos en cuanto a inversiones para atender las necesidades y la prestación de servicios básicos'.
Según Louzán, 'todo eso, dentro de un momento en que la reducción de los ingresos del Estado en el presupuesto (de la diputación) supondrá un 5%' con respecto al año pasado, lo cual demuestra 'la buena salud financiera del ente provincial, pues puede afrontar estos dos nuevos planes con fondos propios'.
El PPC, permitió acometer 78 actuaciones en toda la provincia como obras de saneamiento, abastecimientos, servicios básicos; 69 de ellas en ayuntamientos de menos de 50.000 habitantes.
El presidente del organismo provincial, Rafael Louzán espera concretar esta medida en una junta convocada para el jueves de la próxima semana. Para afrontar ese gasto se recortará el dinero destinado a otras partidas y se redimensionará y adelgazará a la Diputación 'en servicios propios e impropios que ofrece y reduciendo los gastos que soporta'.
Asimismo Rafael Louzán ha anunciado su intención de crear un segundo plan 'que atienda el gasto corriente y las actuaciones prioritarias de los municipios'.
Su cuantía, que se definirá en la citada junta, irá en función de la situación económica de cada ayuntamiento y según las actuaciones preferentes y prioritarias de cada uno de ellos.
'DAR OXÍGENO'
Louzán ha considerado aconsejable crear los dos citados planes para 'dar oxígeno' a los ayuntamientos y ha señalado que la Diputación se convertirá, con esa medida, en 'un auténtico referente de los ayuntamientos en cuanto a inversiones para atender las necesidades y la prestación de servicios básicos'.
Según Louzán, 'todo eso, dentro de un momento en que la reducción de los ingresos del Estado en el presupuesto (de la diputación) supondrá un 5%' con respecto al año pasado, lo cual demuestra 'la buena salud financiera del ente provincial, pues puede afrontar estos dos nuevos planes con fondos propios'.
