El Gobierno central pretende, en el marco de la reforma de la Ley de bases del régimen local, que el sistema de elección de las corporaciones provinciales pase a ser por sufragio universal directo. Esta aseveración fue realizada por el presidente de la Diputación de Pontevedra, Rafael Louzán, en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno provincial, en la que destacó que 'es una buena noticia' porque 'legitima, si cabe cada vez más, a las personas que están al frente de estas administraciones'.
Indicó que abordó este asunto con el secretario de Estado de Administraciones Públicas, Antonio Beteta, en una reunión en la que se trató la citada reforma legislativa. Esta modificación fue valorada por Louzán, debido a que 'supondrá aclarar definitivamente las competencias de cada administración y poner fin a las duplicidades'. Así, terminará con uno de los problemas de la administración local, que está asumiendo 'un porcentaje elevadísimo' de competencias impropias.
En cuanto al cambio en el sistema de elección de los órganos provinciales, hasta ahora reflejo del poder municipal en la demarcación, auguró que dará lugar a 'una nueva etapa'. También informó de que la reforma legislativa implicará una diferenciación entre 'ayuntamientos y municipios'. 'No es una cuestión de número de habitantes, sino una cuestión propiamente operativa', explicó.
Se refirió así que a que los denominados ayuntamientos deberán 'ser capaces de gestionar sus servicios', mientras que los municipios sólo asumirán determinadas competencias. Así, las diputaciones van a ver 'fortalecido' su papel, ya que se responsabilizarán de las competencias que no puedan ser atender los municipios.
En cuanto al cambio en el sistema de elección de los órganos provinciales, hasta ahora reflejo del poder municipal en la demarcación, auguró que dará lugar a 'una nueva etapa'. También informó de que la reforma legislativa implicará una diferenciación entre 'ayuntamientos y municipios'. 'No es una cuestión de número de habitantes, sino una cuestión propiamente operativa', explicó.
Se refirió así que a que los denominados ayuntamientos deberán 'ser capaces de gestionar sus servicios', mientras que los municipios sólo asumirán determinadas competencias. Así, las diputaciones van a ver 'fortalecido' su papel, ya que se responsabilizarán de las competencias que no puedan ser atender los municipios.
