Militantes socialistas de distintos puntos de Pontevedra suscribieron una carta para censurar el comportamiento de su recién elegido secretario provincial, el vigués Santos Héctor, por 'anteponer los intereses personales de una compañera', en referencia a la diputada y concejal Carmela Silva, a 'los estatutos del partido'.
Muestran su 'profundo malestar' ante la primera actuación pública de Santos Héctor refiriéndose a la decisión de la dirección del PSdeG gallego, que encabeza Pachi Vázquez, de expedientar a Silva por su acumulación de cargos como 'una persecución' y 'un abuso de poder'. 'Lejos de buscar el entendimiento entre las distintas estructuras del partido, sólo busca hacer daño a la dirección gallega y a su secretario', lamentan.
'Decimos alto y claro que aquellos que están permanentemente tensando la relación con la dirección gallega debilitan al PSdeG y hacen más difícil el objetivo irrenunciable de gobernar Galicia', sostienen, mientras advierten de que 'no' lo permitirán porque 'ya no caben las componendas que benefician a cuatro' pero 'nunca al partido ni a la sociedad'.
Por su parte, el alcalde de Caldas, Juan Manuel Rey, que pugnó por la secretaría con Santos Héctor, lamentó el comportamiento del vigués y de la propia Silva, por 'buscar excepciones' no previstas en las normas del PSdeG. 'Nos toman por tontos, es una tomadura de pelo en toda regla'. 'Las normas estaban establecidas a priori y, si no quería, no tenía por qué haberse presentado', dijo, lamentando que haya que 'discutir' cuestiones 'obvias' .
Mientras tanto, la dirección federal del PSOE espera poder resolver con diálogo con el PSdeG la situación de Silva, según fuentes socialistas consultadas. La 'permanente' de la ejecutiva del PSdeG pidió el lunes a la dirección que abra un expediente a Silva por 'falta muy grave', pero la gallega en pleno no se reunirá, previsiblemente, hasta el lunes 9. Por eso, en Ferraz creen que hay margen para resolver el asunto, aunque las fuentes no dan pistas de cuál puede ser la fórmula. Si el proceso va adelante podría ser suspendida de militancia e incluso expulsada.
Además, dado que Silva es diputada -y miembro de la ejecutiva federal-, la dirección del PSOE tiene la última palabra sobre su caso.
ORIGEN DEL CONFLICTO
El conflicto entre la dirección socialista gallega y Carmela Silva comenzó el pasado otoño, durante el proceso de elaboración de las listas para las elecciones generales. En ese momento el secretario general del PSdeG, Pachi Vázquez, advirtió a Silva de que si iba a ser diputada debía acatar la norma 'un militante, un cargo', plasmada en los estatutos del PSdeG en su congreso extraordinario de 2009.
La dirección gallega concedió a Carmela Silva una prórroga hasta la aprobación de los presupuestos de Vigo, una circunstancia que se produjo ya a principios de este mes. Y dado que ésta no presentó su renuncia como concejal viguesa en el pleno del pasado lunes, la permanente decidió dar un paso en la dirección de abrir el expediente.
Oficialmente, la dirección federal del PSOE guarda silencio.
'Decimos alto y claro que aquellos que están permanentemente tensando la relación con la dirección gallega debilitan al PSdeG y hacen más difícil el objetivo irrenunciable de gobernar Galicia', sostienen, mientras advierten de que 'no' lo permitirán porque 'ya no caben las componendas que benefician a cuatro' pero 'nunca al partido ni a la sociedad'.
Por su parte, el alcalde de Caldas, Juan Manuel Rey, que pugnó por la secretaría con Santos Héctor, lamentó el comportamiento del vigués y de la propia Silva, por 'buscar excepciones' no previstas en las normas del PSdeG. 'Nos toman por tontos, es una tomadura de pelo en toda regla'. 'Las normas estaban establecidas a priori y, si no quería, no tenía por qué haberse presentado', dijo, lamentando que haya que 'discutir' cuestiones 'obvias' .
Mientras tanto, la dirección federal del PSOE espera poder resolver con diálogo con el PSdeG la situación de Silva, según fuentes socialistas consultadas. La 'permanente' de la ejecutiva del PSdeG pidió el lunes a la dirección que abra un expediente a Silva por 'falta muy grave', pero la gallega en pleno no se reunirá, previsiblemente, hasta el lunes 9. Por eso, en Ferraz creen que hay margen para resolver el asunto, aunque las fuentes no dan pistas de cuál puede ser la fórmula. Si el proceso va adelante podría ser suspendida de militancia e incluso expulsada.
Además, dado que Silva es diputada -y miembro de la ejecutiva federal-, la dirección del PSOE tiene la última palabra sobre su caso.
ORIGEN DEL CONFLICTO
El conflicto entre la dirección socialista gallega y Carmela Silva comenzó el pasado otoño, durante el proceso de elaboración de las listas para las elecciones generales. En ese momento el secretario general del PSdeG, Pachi Vázquez, advirtió a Silva de que si iba a ser diputada debía acatar la norma 'un militante, un cargo', plasmada en los estatutos del PSdeG en su congreso extraordinario de 2009.
La dirección gallega concedió a Carmela Silva una prórroga hasta la aprobación de los presupuestos de Vigo, una circunstancia que se produjo ya a principios de este mes. Y dado que ésta no presentó su renuncia como concejal viguesa en el pleno del pasado lunes, la permanente decidió dar un paso en la dirección de abrir el expediente.
Oficialmente, la dirección federal del PSOE guarda silencio.
