El personal de mantenimiento del Hospital Xeral de Vigo advirtió hoy de que la 'falta de personal' impide que se pueda garantizar el suministro en el nuevo edificio, denominado anexo 2, donde se ubican las urgencias pediátricas, quirófanos, áreas de reanimación y el hospital de día, en caso de fallo eléctrico en las instalaciones.
En declaraciones a los medios efectuadas en el exterior del hospital junto a los miembros del comité de centros del Complexo Hospitalario Universitario de Vigo (Chuvi), uno de los efectivos de mantenimiento explicó que en los turnos de tarde y noche sólo existe un electricista y un calefactor.
Así, advirtió de que si hay una avería eléctrica, el tiempo de reacción para el edificio principal está en unos cinco minutos, mientras que en el nuevo anexo, sólo llegar hasta la zona donde se ubican las instalaciones eléctricas y averiguar cuál es el problema lleva unos 25 minutos. En todo caso, incidió en que si se originase un fallo que afectase a ambos inmuebles y se atiende al principal 'es imposible' atender el anexo.
Por ello, concluyó que el actual servicio de mantenimiento 'no puede garantizar el suministro' en el nuevo edificio y 'desvió' responsabilidades en el Servizo Galego de Saúde. En este sentido, invitó a la conselleira de Sanidade, María José Rubio, a realizar una visita a las instalaciones y comprobar la situación.
DOS ELECTRICISTAS
El portavoz de los trabajadores propuso que la sanidad pública afronte 'un gasto mínimo' y centralice las instalaciones eléctricas del complejo hospitalario y, mientras tanto, que se aumente el personal, por lo menos con dos electricistas por turno.
En total, de 36 efectivos que hay actualmente en mantenimiento, piden que la plantilla se amplíe en ocho nuevos trabajadores, al considerar que debe haber un electricista, un fontanero, un calefactor y un mecánico en el turno de tarde y otros tantos para el de noche.
COMISON DE CENTRO
Por su parte, el presidente de la comisión de centros del Complexo Hospitalario Universitario de Vigo, Antonio Iglesias, recordó que la carencia de personal del Xeral es un 'hecho histórico' pero que se 'agravó' desde la ampliación de las instalaciones con el nuevo anexo.
En este sentido, mientras que la propuesta del la comisión consistió en ampliar la plantilla de efectivos de mantenimiento, lamentó que el Servizo Galego de Saúde sólo 'intentara paliar estas deficiencias con cinco jefaturas' que, según añadió, 'no da solución a los problemas del anexo'.
Así, pidió que se garantice el nivel asistencial de esta zona y de todo el hospital e indicó que si pasa algo y 'el servicio deja de funcionar' será 'responsabilidad' del propio hospital y no de los trabajadores de mantenimiento. Además, afirmó que los ciudadanos tienen 'derecho' a una asistencia 'normalizada' sin que un 'fallo de organización' les prive de ella.
Finalmente, Iglesias lamentó que las declaraciones a los medios se realizaran en la calle, debido a que se les 'prohibió el acceso' a la sala solicitada dentro del Xeral para dar la rueda de prensa.
Así, advirtió de que si hay una avería eléctrica, el tiempo de reacción para el edificio principal está en unos cinco minutos, mientras que en el nuevo anexo, sólo llegar hasta la zona donde se ubican las instalaciones eléctricas y averiguar cuál es el problema lleva unos 25 minutos. En todo caso, incidió en que si se originase un fallo que afectase a ambos inmuebles y se atiende al principal 'es imposible' atender el anexo.
Por ello, concluyó que el actual servicio de mantenimiento 'no puede garantizar el suministro' en el nuevo edificio y 'desvió' responsabilidades en el Servizo Galego de Saúde. En este sentido, invitó a la conselleira de Sanidade, María José Rubio, a realizar una visita a las instalaciones y comprobar la situación.
DOS ELECTRICISTAS
El portavoz de los trabajadores propuso que la sanidad pública afronte 'un gasto mínimo' y centralice las instalaciones eléctricas del complejo hospitalario y, mientras tanto, que se aumente el personal, por lo menos con dos electricistas por turno.
En total, de 36 efectivos que hay actualmente en mantenimiento, piden que la plantilla se amplíe en ocho nuevos trabajadores, al considerar que debe haber un electricista, un fontanero, un calefactor y un mecánico en el turno de tarde y otros tantos para el de noche.
COMISON DE CENTRO
Por su parte, el presidente de la comisión de centros del Complexo Hospitalario Universitario de Vigo, Antonio Iglesias, recordó que la carencia de personal del Xeral es un 'hecho histórico' pero que se 'agravó' desde la ampliación de las instalaciones con el nuevo anexo.
En este sentido, mientras que la propuesta del la comisión consistió en ampliar la plantilla de efectivos de mantenimiento, lamentó que el Servizo Galego de Saúde sólo 'intentara paliar estas deficiencias con cinco jefaturas' que, según añadió, 'no da solución a los problemas del anexo'.
Así, pidió que se garantice el nivel asistencial de esta zona y de todo el hospital e indicó que si pasa algo y 'el servicio deja de funcionar' será 'responsabilidad' del propio hospital y no de los trabajadores de mantenimiento. Además, afirmó que los ciudadanos tienen 'derecho' a una asistencia 'normalizada' sin que un 'fallo de organización' les prive de ella.
Finalmente, Iglesias lamentó que las declaraciones a los medios se realizaran en la calle, debido a que se les 'prohibió el acceso' a la sala solicitada dentro del Xeral para dar la rueda de prensa.
