Una inundación de aguas fecales en un colegio de Pontedeume obliga a suspender las clases en infantil

La planta baja del Colegio Couceiro Freijomil de Pontedeume sufrió una inundación de aguas fecales, provocada por las lluvias caídas de esta madrugada y la pleamar, lo que obligó a suspender las clases de Educación Infantil, según denunció la Asociación de Madres y Padres de Alumnos.
La representante del ANPA, Cristina Pérez Pedrós, explicó que las aguas fecales comenzaron a subir por ‘los váteres, los desagües, y las duchas’ e ‘inundaron los pasillos y varias aulas de la planta baja’. Se trata de la zona en la que se sitúan las clases de Educación Infantil, en las que ‘estudian un centenar de niños de entre 3 y 6 años’.

‘Cuando coincide la pleamar con que llueva, que es lógico que llueva dado que estamos en Galicia y el edificio está situado en frente del mar, coincide todo eso, las aguas y la canalización entran en las tuberías del Couceiro y a través de los váteres, los registros y las duchas suben las aguas fecales’, aseguró Cristina Pérez.

Cada clase de Educación Infantil cuenta con su propio servicio, por lo que la inundación obligó a enviar a los niños a sus casas. ‘Es un problema de salubridad e higiene, son niños de 3 a 6 años, que llevan cualquier cosa a la boca, que tocan con las manos, no se puede consentir que suceda esto’, añadió la responsable del ANPA, que recordó que incluso un gimnasio del colegio está ‘precintado y sin estrenar’, debido a estas inundaciones.

OTRAS INCIDENCIAS

El colegio Couceiro Freijomil fue entregado a la Xunta de Galicia el 9 de septiembre de este año. Las obras se habían iniciado en 2006 y supusieron una inversión de casi tres millones de euros.

A pesar de que se trata de un centro escolar recién inaugurado, Cristina Pérez lamentó que no es la primera vez que se produce esta situación. Así, recordó que ya el pasado día 7 de octubre se registró una inundación de características similares.

La responsable del ANPA resaltó que el delegado provincial de la Xunta de Galicia, Diego Calvo, y representantes de la Inspección Educativa, visitaron el colegio después de la primera inundación, pero criticó que no se ha producido ninguna respuesta. En caso de que no se solucione la problemática, los padres no descartan futuras movilizaciones.

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