Los salarios de los diputados gallegos se congelarán este curso político dentro de un plan de austeridad que permitirá ahorrar en lo que queda de año 1,7 millones de euros. Ya lo dije en otras ocasiones y lo reitero: los ciudadanos esperan de nosotros, de la clase política, actitudes y comportamientos modélicos, aseguró Pilar Rojo, presidenta del Parlamento. La organización del Xacobeo y la tramitación de los Presupuestos centran la agenda. PSOE y BNG temen un recorte en los servicios sociales.
El Parlamento de Galicia congelará los salarios de los diputados en el nuevo curso político, cuyo primer periodo de sesiones estará marcado por la tramitación de los Presupuestos gallegos para 2010, que combinará la prometida austeridad con uno de los principales eventos que se celebran en la comunidad, el Xacobeo. La congelación de sueldos se enmarca en la política de austeridad anunciada por la presidenta de la Cámara autonómica, Pilar Rojo, quien elaboró un plan que permitirá ahorrar en lo que queda de año 1,7 millones de euros.
Ya lo dije en otras ocasiones y lo reitero: los ciudadanos esperan de nosotros, de la clase política, actitudes y comportamientos modélicos, aseguró la popular Pilar Rojo. En esta línea, comprometió que el Parlamento autonómico se apretará el cinturón de acorde con lo que la mayoría de las familias gallegas deben hacer ante la crisis económica. Y, obviamente, los salarios de los diputados serán congelados, remachó la jefa del Legislativo.
De esta manera, el curso político se inicia con un marcado componente económico y con la negociación de las cuentas como uno de los asuntos más importantes por llevar a cabo. A este respecto, mientras que el Grupo Parlamentario Popular defiende que servirán para activar de forma clara los sectores productivos, los partidos de la oposición -PSdeG y BNG- temen un recorte en los servicios sociales.
Gasto social
El portavoz de los populares en el Parlamento, Manuel Ruiz Rivas, calificó estas críticas de la oposición como de estrategia a corto plazo y de goteo permanente para hacer creer que sólo ellos defienden el gasto social y que los enemigos son el resto.
Por su lado, sus homólogos socialista y nacionalista, Xaquín Fernández Leiceaga y Carlos Aymerich, advirtieron de que las primeras medidas del Gobierno que dirige Alberto Núñez Feijóo han sido para desmantelar los servicios públicos y para ejecu tar recortes sociales. En este contexto, socialistas y nacionalistas fijaron como uno de los principales objetivos su defensa de servicios públicos, al tiempo que conseguir del Gobierno gallego un posicionamiento contrario a la fusión de las cajas gallegas por parte de otras foráneas, posibilidad que está abierta tras la aprobación del Real Decreto de Reestructuración de Fondos de la Banca. De hecho, los socialistas pedirán, en la primera reunión de la Xunta de Portavoces, que se active una comisión parlamentaria para abordar este asunto. Por su lado, Aymerich precisó que las iniciativas de su grupo irán encaminadas a combatir la crisis y a defender la identidad gallega frente a ataques del Gobierno autonómico.
A la espera de un acuerdo para el reparto de iniciativas de los grupos en los plenos
Durante los primeros meses de la VIII Legislatura la polémica sobre la interpretación del Reglamento acerca de las prerrogativas de los diputados rodeó las sesiones y acabó con el aviso de los nacionalistas de que acudirán al Tribunal Constitucional para defender sus derechos. De este modo, este curso político llega con la incertidumbre de si los tres grupos parlamentarios alcanzarán un acuerdo sobre el reparto de las iniciativas para cada periodo de sesiones y hoy, en la víspera de la organización del primer pleno, los tres portavoces se reunirán para tratar de zanjar la disputa e iniciar el periodo con normalidad. Pilar Rojo expresó su deseo de que los pactos y acuerdos lleguen al Pazo do Hórreo y se comprometió a realizar todo lo que sea posible para materializar ese objetivo. Con ello, deseó dejar atrás, para siempre, episodios poco edificantes vividos en la Cámara, en referencia a los plantes que realizó la oposición en el anterior periodo, por ver vulnerados sus derechos. Sin embargo, las conversaciones están enrocadas porque los socialistas entienden que hay que respetar en el reparto de iniciativas la proporcionalidad, aunque con la participación de todos los grupos en los plenos; mientras que los nacionalistas piden igualdad para todos los partidos y acusan a sus ex socios de gobierno de ser los que ponen, ahora, problemas. Habrá que esperar a nuevos encuentros para saber si se llega a un acuerdo.
Fructífero
El portavoz del PP en el Parlamento, Ruiz Rivas, espera que este periodo de sesiones sea fructífero en lo legislativo y, entre otras cuestiones pendientes, mencionó la aprobación del plan del litoral, uno de los compromisos del nuevo Gobierno.
Ya lo dije en otras ocasiones y lo reitero: los ciudadanos esperan de nosotros, de la clase política, actitudes y comportamientos modélicos, aseguró la popular Pilar Rojo. En esta línea, comprometió que el Parlamento autonómico se apretará el cinturón de acorde con lo que la mayoría de las familias gallegas deben hacer ante la crisis económica. Y, obviamente, los salarios de los diputados serán congelados, remachó la jefa del Legislativo.
De esta manera, el curso político se inicia con un marcado componente económico y con la negociación de las cuentas como uno de los asuntos más importantes por llevar a cabo. A este respecto, mientras que el Grupo Parlamentario Popular defiende que servirán para activar de forma clara los sectores productivos, los partidos de la oposición -PSdeG y BNG- temen un recorte en los servicios sociales.
Gasto social
El portavoz de los populares en el Parlamento, Manuel Ruiz Rivas, calificó estas críticas de la oposición como de estrategia a corto plazo y de goteo permanente para hacer creer que sólo ellos defienden el gasto social y que los enemigos son el resto.
Por su lado, sus homólogos socialista y nacionalista, Xaquín Fernández Leiceaga y Carlos Aymerich, advirtieron de que las primeras medidas del Gobierno que dirige Alberto Núñez Feijóo han sido para desmantelar los servicios públicos y para ejecu tar recortes sociales. En este contexto, socialistas y nacionalistas fijaron como uno de los principales objetivos su defensa de servicios públicos, al tiempo que conseguir del Gobierno gallego un posicionamiento contrario a la fusión de las cajas gallegas por parte de otras foráneas, posibilidad que está abierta tras la aprobación del Real Decreto de Reestructuración de Fondos de la Banca. De hecho, los socialistas pedirán, en la primera reunión de la Xunta de Portavoces, que se active una comisión parlamentaria para abordar este asunto. Por su lado, Aymerich precisó que las iniciativas de su grupo irán encaminadas a combatir la crisis y a defender la identidad gallega frente a ataques del Gobierno autonómico.
A la espera de un acuerdo para el reparto de iniciativas de los grupos en los plenos
Durante los primeros meses de la VIII Legislatura la polémica sobre la interpretación del Reglamento acerca de las prerrogativas de los diputados rodeó las sesiones y acabó con el aviso de los nacionalistas de que acudirán al Tribunal Constitucional para defender sus derechos. De este modo, este curso político llega con la incertidumbre de si los tres grupos parlamentarios alcanzarán un acuerdo sobre el reparto de las iniciativas para cada periodo de sesiones y hoy, en la víspera de la organización del primer pleno, los tres portavoces se reunirán para tratar de zanjar la disputa e iniciar el periodo con normalidad. Pilar Rojo expresó su deseo de que los pactos y acuerdos lleguen al Pazo do Hórreo y se comprometió a realizar todo lo que sea posible para materializar ese objetivo. Con ello, deseó dejar atrás, para siempre, episodios poco edificantes vividos en la Cámara, en referencia a los plantes que realizó la oposición en el anterior periodo, por ver vulnerados sus derechos. Sin embargo, las conversaciones están enrocadas porque los socialistas entienden que hay que respetar en el reparto de iniciativas la proporcionalidad, aunque con la participación de todos los grupos en los plenos; mientras que los nacionalistas piden igualdad para todos los partidos y acusan a sus ex socios de gobierno de ser los que ponen, ahora, problemas. Habrá que esperar a nuevos encuentros para saber si se llega a un acuerdo.
Fructífero
El portavoz del PP en el Parlamento, Ruiz Rivas, espera que este periodo de sesiones sea fructífero en lo legislativo y, entre otras cuestiones pendientes, mencionó la aprobación del plan del litoral, uno de los compromisos del nuevo Gobierno.
