El último consello de la Xunta en este mes de vacaciones ha aprobado un anteproyecto de ley para regular la amplia y variada red de entes y organismos creados por las consellerías, con distintas formas jurídicas, para desarrollar tareas específicas con presupuesto y personal propios, la conocida como Administración paralela o también 'chiringuitos'.
Son 126 entidades creadas en su gran mayoría durante los gobiernos de Manuel Fraga y para las que el gobierno de Pérez Touriño esbozó un plan de adelgazamiento, pero que no llegó a concretarse. Núñez Feijóo tomó el testigo y ha puesto en marcha un programa, dirigido por el conselleiro de Presidencia, Alfonso Rueda, que supondrá la supresión de 46 de esos organismos que tienen funciones redundantes o duplicadas con otros. La Xunta prevé tener concluida la remodelación en la primavera próxima.
El proyecto de ley ahora aprobado por el ejecutivo gallego, y que será remitido al Parlamento para su debate, pretende complementar esa reestructuración, incluyendo a toda la Administración autonómica, regulándola con una norma que hasta ahora no existía, una carencia de la que ya había advertido al gobierno de Manuel Fraga, en 2001, el Consello Consultivo de Galicia.
CONTROL Y TRANSPARENCIA
Alberto Núñez Feijóo resaltó ayer que ese vacío 'provocou descoordinación e disfuncionalidade en moitos entes, e administracións pouco rigorosas' a la hora de valorar 'os principios de mérito e capacidade de acceso ao emprego público e nos de concorrencia na adxudicación de contratos'. La nueva ley clasificará y limitará los tipos de entes en organismos autónomos, agencias autonómicas, entidades públicas empresariales y consorcios económicos. Puede haber, además, según detalló el presidente de la Xunta, otras entidades instrumentales, sociedades mercantiles públicas y fundaciones del sector público. 'Fóra de aí non pode haber nada máis', destacó. Los organismos ya existentes se acomodarán a la normativa en el plazo de un año.
La norma busca también tener 'maior control nas contratacións' por parte de estas entidades y 'maior transparencia e profesionalidade', un mensaje de advertencia en el que abundó Nuñéz Feijóo, quizás dirigido a los responsables de la Administración, pues también apostilló que esta es una norma para 'disciplinar aos xestores para que cumpran as leis e non busquen organismos paralelos para non cumprir as leis do sector público'.
El anteproyecto de la Xunta ha tenido el respaldo de todos los sindicatos, excepto la CIG. 'Entenden que agora queda garantido o mérito, a publicidade na selección de persoal e a capacidade e concorrencia na selección de contratos', volvió a insistir el presidente.
El proyecto de ley ahora aprobado por el ejecutivo gallego, y que será remitido al Parlamento para su debate, pretende complementar esa reestructuración, incluyendo a toda la Administración autonómica, regulándola con una norma que hasta ahora no existía, una carencia de la que ya había advertido al gobierno de Manuel Fraga, en 2001, el Consello Consultivo de Galicia.
CONTROL Y TRANSPARENCIA
Alberto Núñez Feijóo resaltó ayer que ese vacío 'provocou descoordinación e disfuncionalidade en moitos entes, e administracións pouco rigorosas' a la hora de valorar 'os principios de mérito e capacidade de acceso ao emprego público e nos de concorrencia na adxudicación de contratos'. La nueva ley clasificará y limitará los tipos de entes en organismos autónomos, agencias autonómicas, entidades públicas empresariales y consorcios económicos. Puede haber, además, según detalló el presidente de la Xunta, otras entidades instrumentales, sociedades mercantiles públicas y fundaciones del sector público. 'Fóra de aí non pode haber nada máis', destacó. Los organismos ya existentes se acomodarán a la normativa en el plazo de un año.
La norma busca también tener 'maior control nas contratacións' por parte de estas entidades y 'maior transparencia e profesionalidade', un mensaje de advertencia en el que abundó Nuñéz Feijóo, quizás dirigido a los responsables de la Administración, pues también apostilló que esta es una norma para 'disciplinar aos xestores para que cumpran as leis e non busquen organismos paralelos para non cumprir as leis do sector público'.
El anteproyecto de la Xunta ha tenido el respaldo de todos los sindicatos, excepto la CIG. 'Entenden que agora queda garantido o mérito, a publicidade na selección de persoal e a capacidade e concorrencia na selección de contratos', volvió a insistir el presidente.
