Britney Spears planea un negocio redondo. La cantante podría aumentar considerablemente su cuenta corriente, resentida por sus últimos escándalos, si sale adelante una actuación en Las Vegas por la que cobraría 10 millones de dólares, unos 6,3 millones de euros. Parte de este dinero iría destinado a pagarle un sueldo a su propio padre, que recibirá 10.000 dólares mensuales para compensar la pérdida de su empleo que tuvo que abandonar para cuidar a tiempo completo a su hija.
La cantante, de 26 años, cenó recientemente en un hotel de California con el propietario de un casino-hotel. Durante esta cena, según informaciones de 'DigitalSpy' recogidas por otr/press, se negoció un futuro concierto de Spears en Las Vegas, para confirmar por todo lo alto su regreso al mundo de la música. Una fuente consultada por la publicación declaró que el negocio parece satisfacer a ambos.
En un espectáculo 'lleno de energía y con rápidos cambios de vestuario', Spears podría presentar su siguiente disco, en el que ya trabaja junto a su productor y ex novio J.R. Rotem pese a que aún están recientes los ecos de su anterior álbum. La intérprete de 'Gimme More' quiere curarse de los excesos trabajando y ya está en el estudio de grabación. Rotem describió a la artista como 'maravillosa', una 'maestra' con 'más experiencia que mucha gente. 'Tiene 'ese' factor con el que no cuenta todo artista, por lo que es perfecto trabajar con ella', añadió.
PAGARÁ A SU PADRE
Parece que Spears poco a poco comienza a salir del pozo de escándalos diarios en que cayó hace unos meses. Sus adicciones, su estado mental y la polémica por la custodia de sus hijos convirtieron a la joven cantante en una habitual de la prensa y de las crónicas de sucesos. De hecho, su padre, Jamie Spears, se vio obligado a dejar su trabajo como proveedor de catering para vigilar permanentemente a su hija.
Ahora, el progenitor reclama a Britney la compensación por este abandono completo de su vida anterior. Un tribunal de Los Angeles aprobó una petición del padre gracias a la cual podrá recibir 10.000 dólares al mes por las pérdidas económicas sufridas, ya que la sentencia entiende que 'al asumir la custodia temporal, el señor Spears dejó de trabajar y se ha visto imposibilitado para pagar sus gastos y deudas'. No en vano, quienes conocen bien a la artista admiten que precisamente la compañía de su padre ha sido la que ha logrado revitalizar a la antaño princesa del pop.
En un espectáculo 'lleno de energía y con rápidos cambios de vestuario', Spears podría presentar su siguiente disco, en el que ya trabaja junto a su productor y ex novio J.R. Rotem pese a que aún están recientes los ecos de su anterior álbum. La intérprete de 'Gimme More' quiere curarse de los excesos trabajando y ya está en el estudio de grabación. Rotem describió a la artista como 'maravillosa', una 'maestra' con 'más experiencia que mucha gente. 'Tiene 'ese' factor con el que no cuenta todo artista, por lo que es perfecto trabajar con ella', añadió.
PAGARÁ A SU PADRE
Parece que Spears poco a poco comienza a salir del pozo de escándalos diarios en que cayó hace unos meses. Sus adicciones, su estado mental y la polémica por la custodia de sus hijos convirtieron a la joven cantante en una habitual de la prensa y de las crónicas de sucesos. De hecho, su padre, Jamie Spears, se vio obligado a dejar su trabajo como proveedor de catering para vigilar permanentemente a su hija.
Ahora, el progenitor reclama a Britney la compensación por este abandono completo de su vida anterior. Un tribunal de Los Angeles aprobó una petición del padre gracias a la cual podrá recibir 10.000 dólares al mes por las pérdidas económicas sufridas, ya que la sentencia entiende que 'al asumir la custodia temporal, el señor Spears dejó de trabajar y se ha visto imposibilitado para pagar sus gastos y deudas'. No en vano, quienes conocen bien a la artista admiten que precisamente la compañía de su padre ha sido la que ha logrado revitalizar a la antaño princesa del pop.
