Un incendio en el tercer piso del número 15 de la calle San Rosendo de Verín (cerca del balneario de Sousas) obligó ayer a desalojar a ocho familias (unas 20 personas) a la una y media, cuando la mayoría de ellos se disponían a comer.
La Guardia Civil detuvo al único morador y propietario de la vivienda siniestrada, José H.A. (62 años), como presunto autor del fuego, siendo trasladado al Hospital Comarcal de la villa para ser sometido a un reconocimiento médico, ya que sufre trastornos psicológicos. El presunto pirómano ingresó pasadas las seis de la tarde en la Unidad de Agudos del Santa María Nai (Ourense).
El fuego se declaró pasada la una y media de la tarde provocando una densa humareda, que alarmó al vecindario. Una patrulla de la Policía Local se desplazó de inmediato al lugar y se encontró con la puerta de la vivienda abierta y todo el interior en llamas, por lo que desalojaron a los vecinos del inmueble y colindantes. En cuestión de minutos, hicieron acto de presencia los bomberos, que se desplazaron al lugar con tres vehículos y comprobaron que en el interior de la vivienda no había ninguna persona, al tiempo que procedían a la extinción del fuego, tarea que se prolongó hasta pasadas las tres de la tarde, cuando los vecinos pudieron regresar a sus casas.
Nada más comenzar las labores de extinción, los efectivos recibían otro aviso desde el Servicio de Emergencias 112 de un incendio que se producía en una vivienda de la calle Diputación (centro de la villa), desplazándose al lugar varias dotaciones, aunque al final resultó ser una falsa alarma.
Mientras, la Guardia Civil localizaba a José H.A. (vagabundeaba por el barrio de San Roque, en el que está la vivienda incendiada), que fue trasladado al cuartel y más tarde al centro médico.
Sus convecinos recordaban que el arrestado no está bien y sufre trastornos psicológicos, por los que ya estuvo ingresado en varias ocasiones en centros sanitarios. Hace tan sólo dos días, José H.A. tuvo que declarar en el cuartel de la Guardia Civil por provocar, presuntamente, un atropello, arrojándose a un turismo que circulaba por la carretera de Sousas, en la que confluye la calle en la que está su vivienda, que adquirió tras un período en la emigración.
El fuego se declaró pasada la una y media de la tarde provocando una densa humareda, que alarmó al vecindario. Una patrulla de la Policía Local se desplazó de inmediato al lugar y se encontró con la puerta de la vivienda abierta y todo el interior en llamas, por lo que desalojaron a los vecinos del inmueble y colindantes. En cuestión de minutos, hicieron acto de presencia los bomberos, que se desplazaron al lugar con tres vehículos y comprobaron que en el interior de la vivienda no había ninguna persona, al tiempo que procedían a la extinción del fuego, tarea que se prolongó hasta pasadas las tres de la tarde, cuando los vecinos pudieron regresar a sus casas.
Nada más comenzar las labores de extinción, los efectivos recibían otro aviso desde el Servicio de Emergencias 112 de un incendio que se producía en una vivienda de la calle Diputación (centro de la villa), desplazándose al lugar varias dotaciones, aunque al final resultó ser una falsa alarma.
Mientras, la Guardia Civil localizaba a José H.A. (vagabundeaba por el barrio de San Roque, en el que está la vivienda incendiada), que fue trasladado al cuartel y más tarde al centro médico.
Sus convecinos recordaban que el arrestado no está bien y sufre trastornos psicológicos, por los que ya estuvo ingresado en varias ocasiones en centros sanitarios. Hace tan sólo dos días, José H.A. tuvo que declarar en el cuartel de la Guardia Civil por provocar, presuntamente, un atropello, arrojándose a un turismo que circulaba por la carretera de Sousas, en la que confluye la calle en la que está su vivienda, que adquirió tras un período en la emigración.
