El Concello verinense decidió cortar el agua en todas las viviendas mientras el Juzgado no ejecute la orden de desalojo
Las familias que ocuparon por la fuerza las viviendas deshabitadas, propiedad de la Consellería de Medio Ambiente y del Ministerio de Fomento, entre las calles San Antón y San Rosendo de Verín, no tienen previsto marcharse por, según dicen, están "hartos de vivir en chabolas".
Mientras, el Concello tomó la decisión, como medida de presión para que abandonen los inmuebles, de cortarles el servicio de suministra de agua potable mientras el Juzgado de Instrucción no emita la orden de desalojo. "Ahora mismo estamos sin agua, cuando todos tenemos niños de corta edad", asegura uno de los "okupas", M.S.S.
Del primer asalto para ocupar las viviendas, registrado en la noche del pasado viernes, día 1 de agosto, en el que participaron 17 familias, tan sólo quedaban ayer ocho (las restantes desistieron), que ocupan otras tantas casas. En total, son 24 personas, que decidieron formar una "piña" para defender su permanencia en los inmuebles, que llevan más de una década deshabitados.
El grupo está atento durante toda la jornada a cualquier movimiento que se produce en el exterior (las fuerzas policiales ya los identificaron en tres ocasiones) y se muestran reacios a hablar abiertamente de la ocupación de las casas y muchos menos a dejarse fotografiar o dar a conocer su identidad.
Casas sociales
Las familias accedieron a exponer su situación a La Región y lo primero que quisieron dejar claro es que todos son vecinos de Verín. "Unos llevamos años residiendo en Verín y otros ya nacimos aquí", explica el portavoz, que se identificó como J.S.M.
Tras está afirmación, todo son problemas. El primero es que llevan años reclamando una vivienda social, "pero nadie nos hace caso. Yo mismo intenté hacer mi propia casa, con medios propios, pero viene la Policía Local y paraliza los trabajos", añade el portavoz.
Las ocho familias están integradas por matrimonios de entre 25 y 40 años, todos ellos con niños de entre tres y cuatro años. Incluso hay una pareja con un recién nacido. "Aquí no molestamos a nadie, las casas no son particulares, son de la administración y estaban libres, cayéndose a trozos", apuntó otro ocupa, M.S.D., recordando que el pequeño jardín que da acceso a los inmuebles "estaba lleno de maleza y ya lo adecentamos. También limpiamos las casas por dentro, que estaban llenas de porquería. Retiramos muchos kilos de basura".
Ante la pregunta por qué no se van vivir de alquiler a un piso, el portavoz reacciona con fuerza asegurando que "nadie en Verín les alquila una vivienda por ser gitanos y creer que no vamos a pagar. Si no nos alquilan, no nos dan casas, ni nos dejan construir, no podemos vivir con niños pequeños toda la vida en chabolas”, lamenta.
