Riós deja de verter en la empacadora de Verín tras abrir la nueva de Conso-Frieiras

El Concello de Riós dejó de utilizar la empacadora de la Mancomunidad de Verín, después de trasladar la basura a esta instalación de forma provisional durante un año, debido a la apertura de la planta de Conso-Frieiras, que también usan ahora A Gudiña, A Mezquita, Riós y Vilariño de Conso.
La planta de transferencia de basura de Conso-Frieiras entró en servicio hace un mes y medio para los municipios de A Gudiña, A Mezquita, Riós y Vilariño de Conso. Por este motivo, el Concello de Riós dejó de utilizar la empacadora de la Mancomunidad de Verín, ubicada en el polígono de Pazos, que usó de forma provisional durante un año.

El alcalde, Francisco Armando Veiga, afirma que ‘estou agradecido á Mancomunidade pois o Concello de Riós non había aportado fondos a esta instalación, senón á de Conso-Frieiras’.

El presidente de la Mancomunidad de municipios de Conso-Frieiras y alcalde de A Gudiña, Guillermo Lago, señala que ‘o custe de cada municipio por verter va en función das toneladas que produce cada un’. En este sentido, cita que la media de cada uno oscila entre los 2.000 y 3.000 euros. Además, conside ra fundamental la puesta en marcha de este servicio pues acaba con el uso de vertederos para el depósito de basura al aire libre.

También, el alcalde de A Mezquita, José Luis Ferro Santamarina, afirma que ‘polo momento, está funcionando ben, non temos ningunha queixa. É un servicio moi positivo’.

Sellado de tres vertederos

La puesta en marcha de la empacadora entraña el sellado de los vertederos de A Gudiña, Vilariño de Conso y Riós. En este último municipio ya había sido declarado como clausurado hace un año pero no se ejecutaron las obras para su reconversión en una zona verde. ‘Supoñemos que Medio Ambiente iniciará as obras cuanto antes’, explicó el alcalde de Riós, Francisco Armando Veiga. En el mismo sentido se pronunció el presidente de la Mancomunidad, Guillermo Lago, quien afirmó que ‘xa se puxeron os terreos a disposición da Consellería para que execute as obras canto antes. Ademáis, solicitamos tamén que se constrúa un punto limpo no entorno para completar o servizo’. La apertura de la planta de transferencia de A Gudiña registró una demora importante, pues su construcción había finalizado hace ya cuatro años, y en este momento ya funciona a pleno rendimiento.



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