Estrictas medidas de seguridad fueron aplicadas desde ayer en el Hospital Universitario Austral, donde intervendrán hoy a primera hora de la mañana (horario en Argentina) a la presidenta Cristina Fernández, para extirparle un tumor en el tiroides.
Situado en la ciudad bonaerense de Pilar, a unos 60 kilómetros de la capital del país, el centro reforzó su seguridad interna y aplazó los turnos médicos que no se consideran urgentes. Los especialistas coinciden en que Fernández padece uno de los tipos de cáncer con mejores pronósticos de curación, lo que le permitiría llevar una vida prácticamente normal tras la operación, que estará a cargo de Pedro Saco, jefe de la Sección Cabeza y Cuello del hospital. Ayer, en los alrededores del recinto decenas de militantes oficialistas comenzaron una vigilia con tiendas de campaña y carteles en apoyo a la mandataria.
Fernández optó por operarse en el Hospital Austral, un centro del Opus Dei, en vez de hacerlo en el Argerich, dependiente del gobierno porteño que tiene una unidad especial de atención para los mandatarios.
Fernández optó por operarse en el Hospital Austral, un centro del Opus Dei, en vez de hacerlo en el Argerich, dependiente del gobierno porteño que tiene una unidad especial de atención para los mandatarios.
