Diecinueve personas fueron detenidas a primera hora de ayer en el marco de una redada relacionada con grupos islamistas en diferentes ciudades de Francia (Toulouse, Nantes, Le Mans y París), días después de los asesinatos cometidos en el sur del país por Mohammed Merah. Por su parte, el presidente galo, Nicolas Sarkozy, precisó que se requisaron armas, en particular fusiles Kalashnikov, y aseguró que este tipo de operaciones van a continuar.
Lo cierto es que el objetivo de la operación fue un grupo islamista llamado Forsane Alizza (caballeros del Orgullo) que se creó hace dos años y que fue ilegalizada hace justo un mes por el Consejo de Ministros por su 'incitación a la lucha armada'. Su líder, Mohamed Achamlane, fue detenido en Nantes. Las personas arrestadas viajaron a países como Afganistán, Iraq o Siria y estaban vigiladas por los servicios de inteligencia franceses.
Por su parte, el presidente galo aclaró en una entrevista que estos arrestos no están relacionados con los asesinatos supuestamente cometidos por Mohamed Merah, el 'yihadista' responsable de la muerte de siete personas en las localidades de Toulouse y Montauban este mes de marzo. Aunque sí están relacionados, en cambio, con 'una forma de islamismo radical', señaló el presidente, que adelantó que 'habrá otras operaciones' similares a la de ayer que 'permitirán expulsar del territorio nacional a personas que no tienen nada que hacer' en el país.
Y es que el martes pasado, cinco días después del fallecimiento de Merah, Sarkozy se comprometió a 'acelerar la expulsión' de ciertas personas por motivos de orden público y aseguró que 'todos los que tuvieran propósitos infamantes contra Francia y contra los valores de la República no serán autorizados a entrar' en el país.
Por su parte, el presidente galo aclaró en una entrevista que estos arrestos no están relacionados con los asesinatos supuestamente cometidos por Mohamed Merah, el 'yihadista' responsable de la muerte de siete personas en las localidades de Toulouse y Montauban este mes de marzo. Aunque sí están relacionados, en cambio, con 'una forma de islamismo radical', señaló el presidente, que adelantó que 'habrá otras operaciones' similares a la de ayer que 'permitirán expulsar del territorio nacional a personas que no tienen nada que hacer' en el país.
Y es que el martes pasado, cinco días después del fallecimiento de Merah, Sarkozy se comprometió a 'acelerar la expulsión' de ciertas personas por motivos de orden público y aseguró que 'todos los que tuvieran propósitos infamantes contra Francia y contra los valores de la República no serán autorizados a entrar' en el país.
