Masataka Shimizu, presidente de Tokyo Electric (Tepco), operadora de la central nuclear de Fukushima, tuvo que ser hospitalizado el martes víctima de mareos e hipertensión, según informaron representantes de la compañía japonesa, cuyas acciones sufrieron un desplome del 71% desde que se produjo la catástrofe que asoló el Noreste de Japón y provocó la crisis nuclear más grave desde el accidente de Chernobyl.
El ingreso hospitalario de Shimizu se produjo ante el empeoramiento de los síntomas que habían mantenido ausente al ejecutivo del gabinete de crisis formado por la compañía y el Gobierno desde el pasado 16 de marzo, lo que había dado pie a numerosos rumores sobre el paradero del directivo, que no había sido visto en público desde la rueda de prensa del 13 de marzo, en la que ofreció una primera valoración del impacto del terremoto y el tsunami en las instalaciones de la central de Fuhushima.
