Las cuatro bajas registradas en la Policía Local de Carballiño desde hace más de un mes obligan a los agentes en activo a reforzar los servicios, y por este motivo, la Concejalía de Seguridad diseñará un nuevo organigrama para su puesta en marcha durante el 2012, con el fin de ampliar la vigilancia al rural del municipio.
Concretamente, la plantilla se ha visto reducida a 11 de los 15 policías antes disponibles, ya que dos pasaron a segunda actividad (exentos de patrullas en vehículos y esfuerzos físicos) y otros dos se encuentran en periodo de recuperación tras su intervención en el incendio de un inmueble, el pasado 12 de noviembre. Por este motivo, el concejal responsable de esta área, Emilio Carballeda, apunta que 'unha vez se reincorporen os dous axentes que se atopan convalecientes, faremos un novo organigrama para optimizar os servizos'.
CONTROL
En este sentido, el Concello estudiará el destino de los dos policías locales que pasaron a segunda actividad. Entre las alternativas que baraja la Concejalía de Seguridad se contempla su dedicación a la vigilancia de las zonas de carga y descarga y aquellas que están vedadas para el estacionamiento de vehículos en el casco urbano, siempre conflictivas a nivel de infracciones.'Dado que poden camiñar a pé sen problemas, tamén se lles encargará o coidado dos escolares nas paradas de autocares dos colexios, a fin de controlar o tráfico rodado e evitar calquera tipo de accidente', añade Carballeda
Así, los restantes agentes de servicio afrontarán con más disponibilidad de tiempo las patrullas que realizan en sus vehículos por la periferia del casco urbano y las 15 parroquias del rural, que ahora controla la Guardia Civil. Se mantendrán los turnos actuales de dos agentes (que se desarrollan diariamente de 6,00 a 14,00, de 14,00 a 22,00 y de 22,00 a 6,00 horas), 'mediante un sistema rotatorio, de xeito que nunca lles toque repetir dúas quendas seguidas e poidan descansar', señala el edil 'popular'.
El equipo municipal de gobierno considera que la plantilla se queda corta durante gran parte del año, a excepción de la época estival, cuando se refuerza con dos auxiliares que la Xunta concede a la villa'. El Concello carballiñés descarta por el momento la convocatoria de más plazas, ya que en los últimos dos años se incorporaron tres agentes.
CONTROL
En este sentido, el Concello estudiará el destino de los dos policías locales que pasaron a segunda actividad. Entre las alternativas que baraja la Concejalía de Seguridad se contempla su dedicación a la vigilancia de las zonas de carga y descarga y aquellas que están vedadas para el estacionamiento de vehículos en el casco urbano, siempre conflictivas a nivel de infracciones.'Dado que poden camiñar a pé sen problemas, tamén se lles encargará o coidado dos escolares nas paradas de autocares dos colexios, a fin de controlar o tráfico rodado e evitar calquera tipo de accidente', añade Carballeda
Así, los restantes agentes de servicio afrontarán con más disponibilidad de tiempo las patrullas que realizan en sus vehículos por la periferia del casco urbano y las 15 parroquias del rural, que ahora controla la Guardia Civil. Se mantendrán los turnos actuales de dos agentes (que se desarrollan diariamente de 6,00 a 14,00, de 14,00 a 22,00 y de 22,00 a 6,00 horas), 'mediante un sistema rotatorio, de xeito que nunca lles toque repetir dúas quendas seguidas e poidan descansar', señala el edil 'popular'.
El equipo municipal de gobierno considera que la plantilla se queda corta durante gran parte del año, a excepción de la época estival, cuando se refuerza con dos auxiliares que la Xunta concede a la villa'. El Concello carballiñés descarta por el momento la convocatoria de más plazas, ya que en los últimos dos años se incorporaron tres agentes.
