El presidente de la Entidade Menor de Berán, en Leiro, procedió a suspender un pleno en el que se debatía la anulación de una indemnización de 135.000 euros a la empresa concesionaria del viejo balneario. Las interrupciones por parte de un vecino (hermano del vocal socialista y ex presidente de la Entidade) provocaron el desenlace.
Los enfrentamientos entre populares y socialistas del municipio de Leiro han quedado en evidencia una vez más en la última sesión plenaria de la Entidade Menor de Berán. El presidente José Luis Rodríguez procedía a suspender la sesión debido a las interrupciones que protagonizó Pablo Lorenzo Fariñas (ex presi dente de la Entidade Menor y hermano del actual vocal del PSOE, Tomás Lorenzo).
El debate surgió en torno al polémico balneario de la localidad. En el orden del día figuraba la propuesta del PSOE para anular un acuerdo plenario en el que se había aprobado la indemnización de 135.000 euros a la empresa Egatur, concesionaria del viejo balneario. El secretario, no obstante, informó al pleno que no era necesario revocar dicho acuerdo, puesto que ya había quedado anulado tras la rescisión del contrato con la empresa, por incumplimiento de las condiciones establecidas, entre otras, por no abonar el canon correspondiente a la Entidade Menor. La rescisión se produjo hace año y medio y el informe del técnico aseguraba que la empresa ya no tiene ningún derecho a la indemnización.
De esta forma, el presidente pretendía que se votara en contra de la propuesta o retirar el punto del orden del día. Así fue como surgió el enfrentamiento entre José Luis Rodríguez y Pablo Lorenzo, que en cierto momento llegó a derivar en un intercambio de insultos. El presidente le advirtió que se callara y dado que no lo conseguía le ordenó que abandonara el salón de plenos.
Pablo Lorenzo se negó y de inmediato el presidente procedía a suspender la sesión.
Crispación
Esta situación de crispación se produjo pocos días después del acuerdo alcanzado entre ambas partes para la aprobación del pliego de bases con vistas a la concesión de la explotación del nuevo balneario. Las diferencias entre populares y socialistas retrasaron casi dos años el consenso necesario para dar el visto bueno a las condiciones por las que se regirá la adjudicación de las nuevas instalaciones construidas por la Xunta de Galicia.
El debate surgió en torno al polémico balneario de la localidad. En el orden del día figuraba la propuesta del PSOE para anular un acuerdo plenario en el que se había aprobado la indemnización de 135.000 euros a la empresa Egatur, concesionaria del viejo balneario. El secretario, no obstante, informó al pleno que no era necesario revocar dicho acuerdo, puesto que ya había quedado anulado tras la rescisión del contrato con la empresa, por incumplimiento de las condiciones establecidas, entre otras, por no abonar el canon correspondiente a la Entidade Menor. La rescisión se produjo hace año y medio y el informe del técnico aseguraba que la empresa ya no tiene ningún derecho a la indemnización.
De esta forma, el presidente pretendía que se votara en contra de la propuesta o retirar el punto del orden del día. Así fue como surgió el enfrentamiento entre José Luis Rodríguez y Pablo Lorenzo, que en cierto momento llegó a derivar en un intercambio de insultos. El presidente le advirtió que se callara y dado que no lo conseguía le ordenó que abandonara el salón de plenos.
Pablo Lorenzo se negó y de inmediato el presidente procedía a suspender la sesión.
Crispación
Esta situación de crispación se produjo pocos días después del acuerdo alcanzado entre ambas partes para la aprobación del pliego de bases con vistas a la concesión de la explotación del nuevo balneario. Las diferencias entre populares y socialistas retrasaron casi dos años el consenso necesario para dar el visto bueno a las condiciones por las que se regirá la adjudicación de las nuevas instalaciones construidas por la Xunta de Galicia.
