Más de 4.350 personas fijaron su residencia en el Concello de Ourense el pasado año, un 58% de fuera de la provincia
El padrón del Concello de Ourense se nutre cada vez más de vecinos llegados de fuera de la provincia, según se constata en la última actualización de la estadística de variaciones residenciales publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE), de la que se extrae que el saldo migratorio en la capital se consolida en cifras positivas, con un saldo de 287 el pasado año (casi multiplicando por cinco el registro de 2015). Esta capacidad de atracción que se refuerza permite mitigar la diferencia entre nacimientos y defunciones, que provocan, por su parte, que el padrón siga descendiendo, estando ya por debajo de los 106.000 habitantes.
En 2016, hicieron las maletas para instalarse en la ciudad un total de 4.351 personas. Mientras que el año anterior, prácticamente se dividían a la mitad los que llegaban de alguno de los 91 concellos restantes de Ourense, en la última estadística el panorama muda, bajando la atracción intraprovincial hasta el 42%, un total de 1.865 personas, mientras que se registra un incremento en las cifras de migrantes desde otros puntos de Galicia (803, un 14% más), España (738, un 19%) o el extranjero (945, un 30%.
Por otro lado, Ourense fue capaz de reducir la emigración de su gente respecto a 2015, pasando de 4.132 a 4.064 personas que se borraron del padrón municipal. De estos, 1.675 no se fueron muy lejos, sino que se instalaron dentro de la provincia, mientras que 859 se desplazaron a algún otro punto de Galicia, 899 a alguna provincia española y 631 a un país extranjero.
Más activos
El trabajo publicado por el INE permite comprobar cómo se distribuyen por tramos de edades las variaciones residenciales en todo el Estado.
En este sentido, también hay buenas noticias para el Concello de Ourense, que ganó más de un centenar de personas en edad de trabajar, llegando a la ciudad 3.113, mientras que las que se marcharon se situaron en poco más de 3.000, contribuyendo así a rejuvenecer algo la ciudad.
Por nacionalidades, tres de cada cuatro nuevos residentes (3.261) eran españoles. Entre los extranjeros, más de la mitad procedían de algún país del continente americano, especialmente Venezuela (193) y Brasil (103).
O Barco y Verín, concellos con el peor saldo en 2016
El desglose por municipios que permite realizar el INE en la estadística de variaciones residenciales refleja que solo 25 de los 92 concellos que componen la provincia consiguieron atraer más personas de las que se fueron a otros lugares.
Sorprendentes son los datos de dos cabeceras de comarca como O Barco de Verín, con el peor saldo migratorio de todos los municipios ourensanos, con una pérdida de 120 en el caso de la localidad valdeorresa y de 113 en la de Verín.
En el extremo contrario, junto a continuación del Concello de Ourense, único municipio que supera los 20.000 habitantes, se sitúa Barbadás, que continúa demostrando su capacidad de atraer población (como así se demuestra en cada actualización del padrón). Solo en variaciones residenciales obtuvo un saldo positivo de 162 personas.
En el ranking provincial, se sitúan en los puestos más altos otros concellos limítrofes a la ciudad, como son San Cibrao das Viñas, muy pujante industrialmente, o Pereiro de Aguiar, de similares características. Entre ambos sumaron más de un centenar de residentes.
Los datos positivos se constatan también en villas como Allariz o Carballiño, que combaten la sangría demográfica con 67 y 63 nuevos vecinos, respectivamente.
Las cifras - Migraciones
4.351
Las altas registradas de personas de otros lugares en el padrón del Concello de Ourense durante el pasado
4.064
Las personas que se "fugaron" a otros ayuntamientos o fuera de España.
287
El saldo migratorio positivo de la ciudad.
3.113
Los nuevos empadronados en edad de trabajar.
42%
Porcentaje de residentes que fijaron su residencia en Ourense llegando desde otros concellos de la provincia.
