La calle Camelias cortada al tráfico a la altura del número 13 fue la única consecuencia del derrumbe parcial de una de las paredes del inmueble deshabitado ubicado en ese punto. El derrumbamiento, minutos después de la una y media de la madrugada de ayer, no produjo daños personales.
El edificio estaba ya apuntalado y sus propietarios habían solicitado el pasado jueves permiso al Concello para instalar una valla metálica, según informaba ayer la institución municipal, que también aseguraba que los dueños le habían comunicado el día antes a esa petición que se habían acometido 'los trabajos necesarios para la eliminación de cualquier posibilidad de caída a la vía pública de los elementos de la cubierta de su edificación' y que se encontraban 'a la espera de la solicitud de licencia de demolición del mencionado inmueble'. El expediente de este edificio había comenzado en febrero de 2011, después de que la Policía Local alertase de su estado de abandono.
Al igual que con este edificio, en la actualidad hay unos 200 inmuebles -la mayoría, en el Casco Histórico- con un expediente abierto en disciplina urbanística, a los que el Concello les ha requerido acometer obras que los mantengan en condiciones de seguridad y habitabilidad. Además, la institución local contabilizaba el pasado agosto -últimos datos disponibles- dos expedientes de ruina -en la calle Lepanto y en Alfredo Brañas- que se sumaban a los seis del año 2011 -Alejandro Pedrosa, Burgas, Alejandro Outeiriño y tres en la rúa Vilar-.
La inspección técnica de edificios, de la que el pleno acordará una prórroga hasta diciembre, incide en la necesidad de mantener en buen estado los inmuebles. Paralelamente, una ordenanza municipal obliga a los propietarios de solares y terrenos sin urbanizar a edificarlos, así como a demoler o rehabilitar edificios en mal estado. Desde la entrada en vigor de esta norma, Urbanismo ha abierto 17 expedientes en el Casco Histórico y otros tres más en Progreso (dos) y Alejandro Pedrosa; estos tres se hallan recurridos en el Juzgado.
Al igual que con este edificio, en la actualidad hay unos 200 inmuebles -la mayoría, en el Casco Histórico- con un expediente abierto en disciplina urbanística, a los que el Concello les ha requerido acometer obras que los mantengan en condiciones de seguridad y habitabilidad. Además, la institución local contabilizaba el pasado agosto -últimos datos disponibles- dos expedientes de ruina -en la calle Lepanto y en Alfredo Brañas- que se sumaban a los seis del año 2011 -Alejandro Pedrosa, Burgas, Alejandro Outeiriño y tres en la rúa Vilar-.
La inspección técnica de edificios, de la que el pleno acordará una prórroga hasta diciembre, incide en la necesidad de mantener en buen estado los inmuebles. Paralelamente, una ordenanza municipal obliga a los propietarios de solares y terrenos sin urbanizar a edificarlos, así como a demoler o rehabilitar edificios en mal estado. Desde la entrada en vigor de esta norma, Urbanismo ha abierto 17 expedientes en el Casco Histórico y otros tres más en Progreso (dos) y Alejandro Pedrosa; estos tres se hallan recurridos en el Juzgado.
