El alcalde de la ciudad, Francisco Rodríguez, no aceptará ningún retraso que pueda 'poñer en perigo a viabilidade do AVE en Ourense', por lo que, si la Xunta de Galicia no comunica esta misma semana que se suma al consorcio para la integración de la alta velocidad, el Ministerio de Fomento y el Concello firmarán sin la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras el convenio correspondiente.
La decisión autonómica ha de ser inmediata, porque en la reunión mantenida el pasado 4 de este mes en Madrid entre las tres partes necesariamente implicadas, se acordó un plazo de unos 20 días de reflexión que vencen precisamente esta semana. Y debe ser así porque el delegado territorial de la Xunta en Ourense aseguró que el propio conselleiro Agustín Hernández se desplazará este martes a Ourense para explicar la postura de la Xunta. A este respecto, hay que destacar que el candidato del PP a la alcaldía de Ourense, Rosendo Fernández, y el diputado Celso Delgado ya anunciaron la pasada semana lo que la Xunta hará: rechazar la imposición del modelo de integración acordado inicialmente entre el Concello y Fomento, en aras de abordar un soterramiento que las otras dos partes consideran inviable, sobre todo a estas alturas de plazos.
La conveniencia de un acuerdo para la firma del convenio destinado a la integración del AVE y la constitución del recomendable consorcio que gestione y dirija las obras se produce en Ourense en el peor momento posible, a menos de 100 días para las elecciones municipales, cuando afloran tantos intereses políticos contrapuestos, en función de la rentabilidad electoral que se pueda obtener.
Lo reconocen tanto el PP como el propio regidor socialista, pero a Francisco Rodríguez no le preocupa una posible falta de acuerdo con la Administración autonómica. 'Tampouco firmou en Vigo nin na Coruña e non pasa nada', sólo que la estación intermodal pretendida en el Empalme será únicamente de ferrocarril, aunque el Concello dejará espacio para la de autobuses por si en el futuro se produce el consenso. 'Esa é a súa responsabilidade', recuerda.
El regidor no está por la labor de que se produzca un nuevo retraso porque afrontar ahora un soterramiento supondría, para empezar, la paralización de las obras en O Pino y el forzoso rebaje del túnel de A Burata, ya en construcción (forma parte de la línea de Santiago, la más avanzada en este momento porque pretende estar abierta a finales de este año). Además, quiere 'amarrar' ahora el compromiso con la alta velocidad para dejarlo al margen de los futuros avatares políticos que puedan suceder, tanto en la ciudad como en el gobierno del Estado.
Por eso, esta semana será clave para el impulso a la integración de la alta velocidad ya que la Xunta debe comunicar su postura y, si lo hace proponiendo lo mismo que aportó a la reunión del 4 de febrero, el alcalde impulsará de inmediato la licitación del proyecto de la estación intermodal (aunque Fomento financiará la de ferrocarril, que no la de autobuses) para que Adif saque el proyecto a concurso, además de firmar cl convenio con Fomento al margen de la Administración autonómica.
EL TEXTO DE LA XUNTA
Francisco Rodríguez cree que al final será esto lo que ocurrirá porque el conselleiro de Medio Ambiente, tras recibir de Fomento, el 20 de enero pasado, el borrador de protocolo del consorcio, ya comunicó en esa reunión de Madrid que no firmaría tal documento, poniendo sobre la mesa un texto alternativo, con menor grado de concreción y proponiendo parar el proyecto de la estación de Ourense para un mayor estudio.
Ese texto sugería, frente al planteamiento presentado por el Concello en noviembre, la realización, sin fecha, 'de un estudio previo que analizará y definirá el ámbito asignado, determinando no sólo la edificabilidad terciaria (...), sino también la edificabilidad lucrativa y estudiará el valor neto de los aprovechamientos generados, cuyo importe se destinará a la financiación de las actuaciones', lo que precisamente ya se define en el plan municipal presentado y acordado con el Ministerio.
La conveniencia de un acuerdo para la firma del convenio destinado a la integración del AVE y la constitución del recomendable consorcio que gestione y dirija las obras se produce en Ourense en el peor momento posible, a menos de 100 días para las elecciones municipales, cuando afloran tantos intereses políticos contrapuestos, en función de la rentabilidad electoral que se pueda obtener.
Lo reconocen tanto el PP como el propio regidor socialista, pero a Francisco Rodríguez no le preocupa una posible falta de acuerdo con la Administración autonómica. 'Tampouco firmou en Vigo nin na Coruña e non pasa nada', sólo que la estación intermodal pretendida en el Empalme será únicamente de ferrocarril, aunque el Concello dejará espacio para la de autobuses por si en el futuro se produce el consenso. 'Esa é a súa responsabilidade', recuerda.
El regidor no está por la labor de que se produzca un nuevo retraso porque afrontar ahora un soterramiento supondría, para empezar, la paralización de las obras en O Pino y el forzoso rebaje del túnel de A Burata, ya en construcción (forma parte de la línea de Santiago, la más avanzada en este momento porque pretende estar abierta a finales de este año). Además, quiere 'amarrar' ahora el compromiso con la alta velocidad para dejarlo al margen de los futuros avatares políticos que puedan suceder, tanto en la ciudad como en el gobierno del Estado.
Por eso, esta semana será clave para el impulso a la integración de la alta velocidad ya que la Xunta debe comunicar su postura y, si lo hace proponiendo lo mismo que aportó a la reunión del 4 de febrero, el alcalde impulsará de inmediato la licitación del proyecto de la estación intermodal (aunque Fomento financiará la de ferrocarril, que no la de autobuses) para que Adif saque el proyecto a concurso, además de firmar cl convenio con Fomento al margen de la Administración autonómica.
EL TEXTO DE LA XUNTA
Francisco Rodríguez cree que al final será esto lo que ocurrirá porque el conselleiro de Medio Ambiente, tras recibir de Fomento, el 20 de enero pasado, el borrador de protocolo del consorcio, ya comunicó en esa reunión de Madrid que no firmaría tal documento, poniendo sobre la mesa un texto alternativo, con menor grado de concreción y proponiendo parar el proyecto de la estación de Ourense para un mayor estudio.
Ese texto sugería, frente al planteamiento presentado por el Concello en noviembre, la realización, sin fecha, 'de un estudio previo que analizará y definirá el ámbito asignado, determinando no sólo la edificabilidad terciaria (...), sino también la edificabilidad lucrativa y estudiará el valor neto de los aprovechamientos generados, cuyo importe se destinará a la financiación de las actuaciones', lo que precisamente ya se define en el plan municipal presentado y acordado con el Ministerio.
