Si primero fue un burofax remitido por el líder del PSOE, Rafael Rodríguez Villarino, que daba hasta el pasado sábado al PP para firmar una moción de censura, este viernes venció la fecha que los populares fijaron en su propuesta. El resultado, el esperado: puentes rotos entre los dos únicos partidos que tienen la capacidad de propiciar una alternativa a Gonzalo Pérez Jácome, que respira en su despacho viendo como puede sobrevivir al frente de la ciudad con el apoyo de solo dos concejales.
La jornada de ayer fue una más en la que PSOE y PP cruzaron reproches, acusándose mutuamente de no conseguir un cambio. El presidente local de los populares, Jesús Vázquez, asegura que el PSOE “nunca quixo falar, nin tan sequera escoitar” la posibilidad de un gobierno de coalición, la segunda línea roja que el PP marcó desde que se conoció la decisión de Rafael Rodríguez Villarino de renunciar a ser el candidato a la Alcaldía si así se podía alcanzar un acuerdo.
A eso, sin embargo, respondieron los populares con la exigencia de su dimisión, argumentando que no se fiaban del socialista. Ante ese planteamiento, el PSOE lo tuvo claro y así lo escenificó ayer de nuevo su líder autonómico, Gonzalo Caballero, que convocó en Ourense la Comisión Ejecutiva Nacional del partido, en la que los socialistas aprobaron una declaración por la calidad democrática y respeto a la ciudadanía.
“O que ten acontecido nestas últimas xornadas é moi grave, non podemos admitir eses tics autoritarios”, indicó Caballero, asegurando que la pretensión del PP con sus últimas manifestaciones “son só para enredar e eximirse da súa responsabilidade, o problema que crearon colocando a Jácome, ó que definiron como letal”.
Para Jesús Vázquez, sin embargo, los diferentes actos en los que el PSOE ha escenificado su claro apoyo a Villarino “foron para desviar a atención, escenificando unha artificial victimización do seu portavoz para non ter que respostar ó realmente importante, que era a posibilidade de acadar un goberno de coalición cun alcalde socialista, a proposta que sempre puxemos enriba da mesa desde hai máis de seis meses”. El resultado, pese al barullo, es que el Concello sigue igual casi ocho meses después de que estallase la coalición entre PP y DO. Los distintos amagos de los partidos de la oposición se han quedado en nada más que fuegos de artificio.
Tellado
Desde Santiago también siguen los pronunciamientos sobre la crisis municipal en Ourense. El secretario xeral del PPdeG, Miguel Tellado, instó al PSOE a a”asumir” que nunca habrá un cambio con Villarino en la ecuación “porque no es de fiar”, insistiendo en que la dirección autonómica sigue manteniendo abierta la posibilidad de negociar con los socialistas siempre y cuando se produzca esa renuncia. “El PSdeG está instalando en una hipocresía absoluta”, concluyó Tellado, en otra muestra más del ruido que hay en esta crisis.
