La jueza del Penal 1 ha condenado a Antonio P.V. (56 años) a cuatro meses de prisión y otros cuatro de internamiento en un centro psiquiátrico por su trastorno paranoide crónico con abuso de alcohol.
En concepto de responsabilidad civil, deberá pagar 200 euros a un policía por la lesiones que le ocasionó y 6,35 euros por la camisa que el inculpado rompió la agente.
Los hechos que sustentan la condena por un delito de resistencia a la autoridad sucedieron el 7 de marzo de 2011, sobre las cuatro de la tarde, en el Punto de Atención Continuada del Sergas en la calle Concejo. El personal del PAC alertó a la Policía Nacional porque el acusado comenzó a molestar a los pacientes que allí se encontraban y al personal del centro.
Los policías que acudieron a ese lugar lo trasladaron a la Comisaría porque se negó a ser identificado. Durante el trayecto, según recoge la sentencia, Antonio P.V. comenzó a insultar a los policías y al salir del vehículo se abalanzó sobre uno que en un primer momento logró esquivarlo pero no así el segundo acometimiento, con arañazos en el cuello y la rotura de la camisa.
La jueza concede verosimilitud plena a la declaración de los policías quienes, según dice, "relatan de forma clara como sucedieron los hechos, no entraron en contradicciones y no tienen ningún interés en la causa".
La jueza aplica al condenado una atenuante muy cualificada por enfermedad.
