Los ourensanos están llamando masivamente a Concello y entidades sociales para conocer las formas de colaboración
"¿Cuánto tiempo sería?". Esa es la pregunta más repetida por los ourensanos que llaman al Concello o a las entidades solidarias para informarse sobre la acogida de refugiados sirios. Esa la pregunta más veces formulada y la que carece de respuesta, porque ¿cuánto tiempo durará la guerra?; ¿cuánto tarda una persona, una familia, en poder ser independiente económica y socialmente en una provincia como ésta después de una tragedia como la que arrastran? No existen las respuestas.
De momento, el Concello de Ourense tan sólo ha recibido seis propuestas en firme para ofrecerse bien como familia de acogida, bien como voluntarios para ayudar en el momento en que se produzca la llegada de los refugiados a Ourense. Mientras, las llamadas tanto al ente municipal como a Cruz Roja se están produciendo sin cesar en busca de información. Los técnicos municipales señalan que "de momento nos han ordenado que enviemos estos registros a la Xunta para desde allí elaborar una especie de informe de todos los recursos e infraestructuras disponibles en cada Concello. Suponemos que después se nos será reenviado".
Por ahora, se desconoce cómo se hará la distribución de los más de 14.000 refugiados que España ha prometido acoger y cuántos recalarán en esta provincia. "Aquí no sabemos nada, ahora estamos registrando las solicitudes de las familias y poco más", señalan desde el Concello, que está a la espera que la Xunta concrete el contingente de refugiados para determinar las necesidades del operativo que sería preciso articular.
Cruz Roja Ourense también ha señalado que están a la espera de lo que decida la central de la organización. "La sociedad ourensana es muy solidaria, están llamando muchísimo para saber como ayudar. Tenemos cuentas bancarias a las que poder hacer donativos, pero, de momento, desconocemos cómo será todo el proceso". La Diócesis de Ourense ha ofrecido sus recursos para acoger refugiados, al igual que los concellos de Carballiño,Barbadás o Verín.
Lo que sí es concreto son los refugiados que de manera casi invisible ya viven aquí. En el 2014, un total de 15 personas solicitó asilo en Galicia, sólo una lo hizo en Ourense, según los datos del Ministerio del Interior. El resto lo hizo en A Coruña, siete; en Lugo, cuatro; y en Pontevedra, tres. Un año antes, en 2013, los solicitantes de protección internacional en Ourense fueron dos, procedentes de Malí y Mauritania, pero también residen refugiados de otras guerras que han caído en el olvido como Afganistán. En Galicia, fueron ocho en total, procedentes de Rumanía, Siria y Colombia.
