Los nuevos impuestos que el PP de Barbadás pretende aprobar para 2008 están en el ojo del huracán. El BNG ya anunció una enmienda a la imposición de una nueva tasa por el vertido y saneamiento de aguas residuales que case duplicará o recibo actual y BNG y PSOE arremeten contra el pago para expedir documentos administrativos.
Los nuevos impuestos que el PP de Barbadás pretende aprobar para 2008 enfrentan a oposición y grupo de gobierno.
Los nuevos impuestos que el PP de Barbadás pretende aprobar para 2008 enfrentan a oposición y grupo de gobierno.
El BNG anunció ayer una enmienda contra la imposición de un nuevo impuesto a la ciudadanía en concepto de tasa por el vertido y saneamiento de aguas residuales, que se traduce en una cantidad fija de 3 euros mensuales y 0,3 euros por metro cúbico de agua consumida. Según los nacionalistas, supondrá un incremento medio del 48% en el recibo del agua para el próximo año e implicará, alegan, que los vecinos de Barbadás paguen más que los de Ourense (donde está la depuradora) por el mismo servicio.
El alcalde, Freire Couto, califica las críticas de demagogia y sostiene que el Concello cobrará a los vecinos lo que paga a Ourense por verter en el municipio (consumo de alcantarillado). Según explica, antes no había esta tasa porque el Concello de Ourense no la cobraba, pero desde la firma del convenio entre ambas entidades municipales para verter en Ourense, hace algo más de un año, se le está cobrando. Además, alega que no pasar ese tributo a los consumidores puede restar a la institución municipal la posibilidad de recibir subvenciones de Medio Ambiente.
Asimismo, BNG y PSOE coinciden en criticar la intención del PP de cobrar a los vecinos por toda clase de documentos admi nistrativos que expidan (certificados de empadronamiento, compulsas, modificación de domicilio...) y hablan de afán recaudador e incluso de obstaculización a la labor política, en tanto que los partidos temos que solicitar constantemente moita documentación. Pero Freire Couto indica que la imposición de esta tasa, que justifica en que todo lo que es gratis se abusa de ello y en un municipio de 10.000 habitantes supone un gasto importante para las arcas municipales, no es una decisión firme.
El alcalde, Freire Couto, califica las críticas de demagogia y sostiene que el Concello cobrará a los vecinos lo que paga a Ourense por verter en el municipio (consumo de alcantarillado). Según explica, antes no había esta tasa porque el Concello de Ourense no la cobraba, pero desde la firma del convenio entre ambas entidades municipales para verter en Ourense, hace algo más de un año, se le está cobrando. Además, alega que no pasar ese tributo a los consumidores puede restar a la institución municipal la posibilidad de recibir subvenciones de Medio Ambiente.
Asimismo, BNG y PSOE coinciden en criticar la intención del PP de cobrar a los vecinos por toda clase de documentos admi nistrativos que expidan (certificados de empadronamiento, compulsas, modificación de domicilio...) y hablan de afán recaudador e incluso de obstaculización a la labor política, en tanto que los partidos temos que solicitar constantemente moita documentación. Pero Freire Couto indica que la imposición de esta tasa, que justifica en que todo lo que es gratis se abusa de ello y en un municipio de 10.000 habitantes supone un gasto importante para las arcas municipales, no es una decisión firme.
