Ni brotes verdes, ni rayos de esperanza, ni luz al final del túnel. El comienzo de año no da tregua y los malos resultados de la economía nacional se reflejan en las estadísticas provinciales con milimétrica precisión. El miedo se ha adueñado de los hogares ourensanos y el consumo interno se ha hundido. La consigna es el ahorro y eso lo dicen las cifras de la contabilidad nacional.
Por eso, la mala salud de la economía tiene su reflejo en la caída de la recaudación fiscal, que en la provincia de Ourense ha sido de un 24,4% en el primer trimestre del año respecto al mismo período del ejercicio anterior. Este porcentaje es uno de los más elevados del país, pero no es un hecho aislado, sino muy similar a lo que ha ocurrido en otras cinco provincias españolas: León, Avila, Badajoz, Castellón y Cantabria.
La Agencia Tributaria ha dado a conocer el informe del primer trimestre del año 2012 en el que se recoge el desplome en los ingresos en todo el país tanto a través de los impuestos directos (Renta de las Personas Físicas, Impuesto de Sociedades, Renta de no Residentes), como de los indirectos (IVA, alcohol y derivados, cerveza, hidrocarburos, electricidad y otros). Las cifras reflejan que frente a los 125,4 millones de euros que ingresó la administración estatal en Ourense en el primer trimestre del año 2011 ha pasado a los 94,8 en este inicio de año. Es una de las mayores caídas de las provincias españolas y no tienen que ver nada con la media nacional, que se sitúa en un descenso del -5,9%.
IMPUESTOS INDIRECTOS
El brusco descenso en la recaudación provincial tiene su origen en los impuestos indirectos, aquellos que se pagan a través de los productos más cotidianos: la alimentación, tabaco, gasolina y alcohol. Los ourensanos han reducido a la mitad el consumo de estos artículos durante el primer trimestre del año.
Así, de los 65 millones de euros que recaudó el Estado con el IVA en la provincia durante el primer trimestre de 2011 se ha descendido a 34 millones de euros, una reducción del -47,7%, un porcentaje capaz de estrangular la economía, los negocios y el empleo de cualquier ciudad. Sin embargo, no ha sido la única provincia con estos resultados, las ha habido incluso peores, como Valladolid con un -53%, Lérida con un -64% o Álava con una caída del -48%.
En el caso de los impuestos indirectos, los que gravan productos como el tabaco, la gasolina y el alcohol, también ha habido un descenso en la recaudación, aunque menor. De los 1.925 millones de euros de 2011 a los 1.750, lo que supone un -9,1%.
En Galicia el porcentaje se suaviza con una caída de tan sólo un -3,7%. Pero el comportamiento ha sido muy desigual en las cinco ciudades gallegas analizadas, con mejores resultados en el norte y peores en el sur de la Comunidad. A Coruña pasó de una recaudación de 814 millones de euros en el primer trimestre de 2011 a 824 en 2012, un saldo positivo de 1,3%; Lugo pasó de 107 millones a 127,9 con una subida del 19,2%; Pontevedra pasó de 170 millones de euros a 161,2, con un descenso del -5,3%; mientras que Vigo bajó de los 260 millones a los 215, un retroceso del -17,5 por ciento. Los datos se corresponden con cada una de las provincias gallegas, a excepción de Pontevedra, donde hay una demarcación tributaria propia para Vigo.
La Agencia Tributaria ha dado a conocer el informe del primer trimestre del año 2012 en el que se recoge el desplome en los ingresos en todo el país tanto a través de los impuestos directos (Renta de las Personas Físicas, Impuesto de Sociedades, Renta de no Residentes), como de los indirectos (IVA, alcohol y derivados, cerveza, hidrocarburos, electricidad y otros). Las cifras reflejan que frente a los 125,4 millones de euros que ingresó la administración estatal en Ourense en el primer trimestre del año 2011 ha pasado a los 94,8 en este inicio de año. Es una de las mayores caídas de las provincias españolas y no tienen que ver nada con la media nacional, que se sitúa en un descenso del -5,9%.
IMPUESTOS INDIRECTOS
El brusco descenso en la recaudación provincial tiene su origen en los impuestos indirectos, aquellos que se pagan a través de los productos más cotidianos: la alimentación, tabaco, gasolina y alcohol. Los ourensanos han reducido a la mitad el consumo de estos artículos durante el primer trimestre del año.
Así, de los 65 millones de euros que recaudó el Estado con el IVA en la provincia durante el primer trimestre de 2011 se ha descendido a 34 millones de euros, una reducción del -47,7%, un porcentaje capaz de estrangular la economía, los negocios y el empleo de cualquier ciudad. Sin embargo, no ha sido la única provincia con estos resultados, las ha habido incluso peores, como Valladolid con un -53%, Lérida con un -64% o Álava con una caída del -48%.
En el caso de los impuestos indirectos, los que gravan productos como el tabaco, la gasolina y el alcohol, también ha habido un descenso en la recaudación, aunque menor. De los 1.925 millones de euros de 2011 a los 1.750, lo que supone un -9,1%.
En Galicia el porcentaje se suaviza con una caída de tan sólo un -3,7%. Pero el comportamiento ha sido muy desigual en las cinco ciudades gallegas analizadas, con mejores resultados en el norte y peores en el sur de la Comunidad. A Coruña pasó de una recaudación de 814 millones de euros en el primer trimestre de 2011 a 824 en 2012, un saldo positivo de 1,3%; Lugo pasó de 107 millones a 127,9 con una subida del 19,2%; Pontevedra pasó de 170 millones de euros a 161,2, con un descenso del -5,3%; mientras que Vigo bajó de los 260 millones a los 215, un retroceso del -17,5 por ciento. Los datos se corresponden con cada una de las provincias gallegas, a excepción de Pontevedra, donde hay una demarcación tributaria propia para Vigo.
