Ourense comenzó a recibir durante la jornada de ayer a centenares de visitantes procedentes de todos los puntos del país, mientras Oira desbordó rock con Los Suaves, Gatillazo y Miguel Costas sobre el escenario

Inicio de lujo en el Derrame Rock

El público se mostró muy entusiasmado con cada una de las actuaciones musicales de la jornada inaugural del Derrame Rock, ayer. (Foto: MARTIÑO PINAL)
El recinto deportivo de Oira desbordó ayer rock en estado puro y buen ambiente en la primera jornada de celebración del festival Derrame Rock, que se prolongará hasta mañana. Ya desde primera hora de la tarde comenzaban a llegar, además de ourensanos, visitantes procedentes de múltiples puntos del país como Lanzarote, Barcelona, Canarias, Cádiz o León que no quisieron perderse el inicio del evento.
Muchos lo hicieron con la tienda de campaña a cuestas, sacos de dormir, bolsas de comida y bebida, pero, sobre todo, con ganas de pasárselo en grande y en grupo. De hecho, el cámping ya superaba ayer el 50% de su ocupación, y todavía quedan muchas horas de música por delante. En la boca de todos, el acierto de concentrar en un mismo espacio la zona de acampada y los escenarios, que evitan desplazamientos innecesarios. De nuevo la organización del festival hizo un llamamiento para instar a los visitantes a que utilicen el transporte urbano, que fue reforzado para la ocasión.

No faltaron tampoco las camisetas de Los Suaves -tanto en el centro de la ciudad como en Oira-; un atuendo que ya lucía ayer por la tarde la concelleira de Cultura de Ourense, Isabel Pérez, que también siguió el concierto, y aseguró que tampoco se perderá las actuaciones de Loquillo o Sepultura, ni la de Rosendo, mañana. Pérez recordó la importancia del evento para la dinamización de la ciudad, con la 'xeración de postos de traballo e hoteles cheos'. Asimismo, aseguró que constituye 'un espazo único onde os grupos ourensáns e galegos poden amosar o que producen e compartir cartel con figuras de recoñecemento estatal e internacional'.

Mientras, en el otro lado, centenares de personas trabajando en las taquillas, organización, iluminación, sonido, montaje, camareros, además de personal de seguridad. 'En el Derrame todo lleva un control muy estricto, jugamos con un margen de cinco minutos, pero hasta ni eso, todo va por reloj', comentó el jefe de producción del festival, Gerardo Gil. También concretó que el hecho de contar con dos escenarios permite sesiones de música ininterrumpidas. Así, 'mientras un grupo está tocando, el otro realiza los chequeos de líneas o pruebas de sonido interiores'.

Y así fue. Música sonando desde las 19.00 horas ante un público incansable que saltaba y disfrutaba con cada canción. Mientras, otros, sentados a la sombra, reservaban fuerzas para seguir muy de cerca las actuaciones de la noche, con las que llegarían Los Suaves, Gatillazo o Miguel Costas, entre otros.


DIVERSIÓN GARANTIZADA

La música continuará en la jornada de hoy a partir de las 15.00 horas con Clockwork, Switchtense o Machina. Mientras, en torno a las nueve y media llegarán las actuaciones de Hamlet, Sepultura, Burning o Loquillo, entre otros.

Desde luego un cartel que además de rock del bueno garantiza diversión hasta altas horas de la madrugada. No cabe duda de que Ourense suena a rock más que nunca, y no sólo eso, aguarda a miles de visitantes durante las próximas horas. El director del festival, Enrique Granda, aseguró que 'aunque no conozcas este tipo de música la diversión está asegurada'.

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