Un agente de Vigilancia Aduanera requirió al Concello diversa documentación y expedientes de los últimos siete años

La jueza del caso Pokemon investiga contratos de desbroces en Carballiño

El agente de Vigilancia Aduanera, abandonando el Concello con parte de la documentación bajo el brazo. (Foto: MIGUEL ÁNGEL)
Un agente del Servicio de Vigilancia Aduanera se personó ayer en el Concello de Carballiño y pidió la documentación relativa a la relación de esta institución local con seis empresas, siguiendo la orden de la titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Lugo, Pilar de Lara, que instruye el caso Pokemon, en el que el regidor municipal, Argimiro Marnotes, figura como imputado por supuesto tráfico de influencias y revelación de secreto.
El agente se presentaba por sorpresa en las dependencias municipales pasado el mediodía, dirigiéndose a Secretaría para que dispusiera de la documentación, de la que el alcalde no ha facilitado información por estar el proceso sometido a secreto sumarial.

No obstante, fuentes consultadas por este periódico señalan que la solicitud de expedientes se remonta al año 2006 y que algunos de ellos tienen que ver con el procedimiento negociado sin publicidad que siguió el Concello en el mes de mayo del pasado año para la realización de desbroces de caminos rurales. Las autoridades habían contactado con tres empresas en las que figuraban los mismos propietarios, José Daniel Blanco y Olga González, ambos imputados en la misma operación Pokemon por cohecho y tráfico de influencias, y que tras haber sido detenidos en septiembre pasado para declarar ante la juez, se encuentran en libertad con cargos.

Lo que no ha trascendido es si el requerimiento de la juez tiene que ver también con la relación del Concello y del propio Marnotes con el grupo Vendex, implicado en la trama de pagos a políticos a cambio de concesiones de servicios públicos y obras. Este grupo había sido seleccionado para gestionar la ORA en Carballiño, un proceso que anuló Marnotes cuando ganó las elecciones municipales. Pero el regidor había reconocido su relación profesional con Vendex cuando Pilar de Lara le notificó su imputación, durante el pasado mes de febrero. Marnotes admitía que le debía a la empresa el acondicionamiento de su jardín particular porque todavía no le había presentado la factura, matizando que el encargo lo había hecho antes de salir elegido alcalde de Carballiño. Ayer declaraba que el agente había pedido documentación actual y de años atrás de esas seis empresas, 'xa foran contratadas ou non polo Concello', asegurando que se ofreció a facilitarle todo cuanto pidiese.

Marnotes también manifestaba que desde su declaración en el Juzgado de Lugo, el pasado 8 de marzo, no ha vuelto a tener información sobre su imputación en el proceso, salvo las notificaciones mensuales que reciben los abogados sobre la ampliación del secreto de sumario.

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