La compañía Iberdrola encara ya la última fase de las obras de ampliación de la central de Santo Estevo, cumpliendo el calendario para que la planta pueda entrar en funcionamiento en diciembre de este año.
La semana pasada, los técnicos que trabajan en las instalaciones acometieron una de las maniobras más relevantes del proceso, el encaje del rotor de la nueva turbina, la pieza central que proporciona el movimiento del equipo. Se trata de una maniobra compleja y que requirió una gran precisión, ya que la turbina tiene un diámetro de 8,7 metros y el rotor se encaja dentro del estator con una separación de tan solo milímetros.
El montaje de esta pieza ha sido realizado por técnicos de la firma Voith-Siemens en la caverna de Santo Estevo, durante 10 meses. Para su colocación, los operarios utilizaron el puente-grúa instalado en la central, que tiene capacidad para soportar 360 toneladas de peso. La maniobra de encaje dentro del estator tuvo una duración de dos horas.
Con esta operación se inicia la última fase de ensamblaje de la turbina, que se espera que esté concluida a finales del próximo mes de julio. Esto dará paso a la puesta en marcha de la central, con el fin de que pueda estar operativa en diciembre.
Las obras de ampliación de la central de Santo Estevo han tenido una duración de cuatro años y la inversión realizada asciende a 127 millones de euros. La potencia de producción hidroeléctrica de la planta se incrementará en 176 megavatios, hasta alcanzar los 400, lo que la situará entre las de mayor producción en Galicia. Según Iberdrola, la ampliación permitirá evitar la emisión de más de 74.800 toneladas de CO2 anuales y contribuirá a dar estabilidad al sistema de suministro eléctrico.
El montaje de esta pieza ha sido realizado por técnicos de la firma Voith-Siemens en la caverna de Santo Estevo, durante 10 meses. Para su colocación, los operarios utilizaron el puente-grúa instalado en la central, que tiene capacidad para soportar 360 toneladas de peso. La maniobra de encaje dentro del estator tuvo una duración de dos horas.
Con esta operación se inicia la última fase de ensamblaje de la turbina, que se espera que esté concluida a finales del próximo mes de julio. Esto dará paso a la puesta en marcha de la central, con el fin de que pueda estar operativa en diciembre.
Las obras de ampliación de la central de Santo Estevo han tenido una duración de cuatro años y la inversión realizada asciende a 127 millones de euros. La potencia de producción hidroeléctrica de la planta se incrementará en 176 megavatios, hasta alcanzar los 400, lo que la situará entre las de mayor producción en Galicia. Según Iberdrola, la ampliación permitirá evitar la emisión de más de 74.800 toneladas de CO2 anuales y contribuirá a dar estabilidad al sistema de suministro eléctrico.
