El adolescente, inimputable penalmente porque tenía 13 años cuando ocurrieron los hechos, estuvo ingresado durante meses en le centro de menores de A Carballeira
El menor que en septiembre del pasado año agredió brutalmente a su madre en Verín retornó recientemente al domicilio familiar. El adolescente, inimputable penalmente porque tenía 13 años cuando ocurrieron los hechos, estuvo ingresado durante meses en le centro de menores de A Carballeira ya que la Administración autonómica asumió la guarda y decretó esa medida de protección.
En estos casos, la Ley del Menor faculta al fiscal para archivar la causa por falta de responsabilidad penal a tenor de la edad del agresor pero, si detecta una situación de desprotección, lo pone en conocimiento de la Administración autonómicas para que acuerde alguna medida.
La madre del adolescente, de 38 años y vecina de Verín, estuvo ingresada y fue operada de urgencia en el hospital vigués de Povisa por los golpes que le propinó su hijo. Tras la agresión, el verinense huyó de la casa y estuvo
varias horas desaparecido.
Un joven de 13 años es inimputable, condición que cambia cuando el autor de posibles actos delictivos es mayor de 14. En los casos menos graves, se prevén medidas de reeducación y seguimiento con intervenciones psicosociales dentro del ámbito familiar
