La rápida alerta de los vecinos del edificio número cinco de la calle Saínza y la inmediata intervención del cuerpo de bomberos de la ciudad impidió que las llamas provocadas por una olla olvidada en el fuego arrasasen por completo la cocina de una vivienda del cuarto piso.
Finalmente, el fuego y el instenso humo apenas produjeron daños materiales en el interior del domicilio donde se originó el incidente, aunque los efectivos del cuerpo de bomberos tuvieron que cortar la calle a la circulación de los vehículos entre las 11:15 y las 11:50 horas, ya que en esos momentos no se encontraba ninguno de los habitantes en el interior del domicilio amenazado.
