La crisis inmobiliaria no afecta de forma tan intensa a Ourense como a otras provincias, según los datos que expuso ayer la Asociación de Constructores, si bien creen que los pisos se van a encarecer con las nuevas Normas do Hábitat Galego.
Miragaya Ourense fue la provincia gallega que menos notó el descenso de ventas de vivienda en 2007, según los datos de transacciones facilitados por la Asociación de Constructores (ACO), que ayer realizó balance de la situación del sector en su asamblea anual.
Así, en Ourense las ventas cayeron un 4,2% con respecto al año anterior, descenso menor que en el resto de provincias: un 15% en Lugo, un 17% en Pontevedra y un 25% en A Coruña. En todo caso, el descenso se produce con respecto a 2006, un año que fue excepcionalmente bueno, por lo que los constructores indican que la cifra de viviendas vendidas -2.439, con un volumen de negocio de 201 millones- se encuentra entre los mejores del los últimos años, según el presidente de ACO, Eligio Nieto.
Los visados de viviendas también cayeron de los 3.562 en 2006 a 2.439 en 2007. El descenso fue generalizado en casi todos los municipios, aunque tuvo especial incidencia en algunos como Verín (que pasó de 315 visados en 2006 a 36 en 2007).
Los empresarios sostienen que la crisis no está afecta tanto en Ourense como en otras regiones y que se siguen vendiendo pisos, aunque no con tanta rapi dez como antes. Según explican, hay compradores interesados e incluso llegan a realizar la reserva, pero luego no pueden comprar porque no logran financiación. Antes se daba de forma demasiado alegre y ahora, demasiado restringida, explica Eligio Nieto. También los promotores tienen problemas para acceder a financiación, pero sostienen que no hay empresas ourensanas atravesando graves dificultades, como ocurre en otras provincias, ya que las firmas locales no tienen grandes bolsas de suelo.
Así, en Ourense las ventas cayeron un 4,2% con respecto al año anterior, descenso menor que en el resto de provincias: un 15% en Lugo, un 17% en Pontevedra y un 25% en A Coruña. En todo caso, el descenso se produce con respecto a 2006, un año que fue excepcionalmente bueno, por lo que los constructores indican que la cifra de viviendas vendidas -2.439, con un volumen de negocio de 201 millones- se encuentra entre los mejores del los últimos años, según el presidente de ACO, Eligio Nieto.
Los visados de viviendas también cayeron de los 3.562 en 2006 a 2.439 en 2007. El descenso fue generalizado en casi todos los municipios, aunque tuvo especial incidencia en algunos como Verín (que pasó de 315 visados en 2006 a 36 en 2007).
Los empresarios sostienen que la crisis no está afecta tanto en Ourense como en otras regiones y que se siguen vendiendo pisos, aunque no con tanta rapi dez como antes. Según explican, hay compradores interesados e incluso llegan a realizar la reserva, pero luego no pueden comprar porque no logran financiación. Antes se daba de forma demasiado alegre y ahora, demasiado restringida, explica Eligio Nieto. También los promotores tienen problemas para acceder a financiación, pero sostienen que no hay empresas ourensanas atravesando graves dificultades, como ocurre en otras provincias, ya que las firmas locales no tienen grandes bolsas de suelo.
