La tasa de ocupación de puestos baja, en espera de las obras de reforma
"La plaza de abastos mantiene los niveles de ocupación de años anteriores dando trabajo de manera directa a 175 personas". Así lo pone de manifiesto la memoria del año pasado del mercado principal de la ciudad, que suma además como trabajadores activos a las rianxeiras, los vendedores ambulantes o los propios empleados de la plaza como concesionaria municipal. Es decir, "230 personas acuden todos los días al mercado a ganarse la vida", según señala el memoria del mercado. En la medida de sus posibilidades la plaza tiene capacidad de generar "riqueza para la ciudad ya que de ese empleo 95 personas son autónomos y hay 12 pymes, lo cual tiene un efecto multiplicador en la ciudad".
Emilio González, presidente de los comerciantes de la plaza de abastos, defiende "la vitalidad de este tipo de comercio, que ha seguido haciendo una apuesta fundamental por la calidad y la atención a los clientes, y eso nos ha permitido aguantar los años más duros de la crisis". En estos momentos la plaza de abastos cuenta con 244 puestos, de los que 119 están en el interior y 125 en el exterior. El último año hubo cinco nuevas incorporaciones, de las que dos son puestos que están pendientes de apertura como uno de comida para llevar y una panadería.
En cuanto la tasa de ocupación ha descendido un 4% respecto al año pasado "debido a la paralización de los traspasos en el interior del edificio noble a la espera de conocer el proyecto de traslado y las necesidades de metros para los actuales adjudicatarios", según explica la memoria.
Efectivamente, el mercado vivirá este año una situación compleja que deberá gestionar: las obras de reforma integral podrían iniciarse a lo largo el actual ejercicio. Mientras tanto, la ubicación provisional de los puestos será la Alameda. González reconoce que el 2016 "será un año muy difícil porque debemos enfrentarnos a retos como el cambio mientras duren las obras y la realización del proyecto en su conjunto".
El presidente de los placeros también recuerda que "uno de mis objetivos es incorporar a la reforma integral el espacio del rianxo, que ha sido y sigue siendo el alma de la plaza de abastos".
La oferta comercial de todo el conjunto es de unos 10.000 metros cuadrados, de los que mil están dentro del edificio principal y el resto en el exterior. La actividad con más metros cuadrados ocupados en la venta de fruta, con 3.000 metros cuadrados. Entre las pequeñas reformas de los ultimos meses destaca la colocación de un nuevo suelo y el ascensor.
