El abogado de una propietaria que pleitea en el asunto tacha la medida de "expropiación chavista"
La comisión de pleno extraordinaria celebrada ayer dictaminó favorablemente, con el apoyo del grupo socialista y la abstención de la oposición (que se reservó el voto para la sesión plenaria del viernes), la modificación presupuestaria para completar las expropiaciones de terrenos incluidos en el Plan especial de As Burgas. Se trata de obtener el acuerdo de la mayoría de la Corporación para disponer de 1,6 millones de euros, que convertirían al Concello en propietario de todo el área de reparto, independientemente de los recursos judiciales presentados.
Ya se ha reactivado el expediente de expropiación, que fue declarado caducado a instancias de los propietarios de una pequeña parcela de 161 metros cuadrados, a los que defiende en este pleito el abogado Feijóo Miranda, a su vez letrado del promotor Bautista Rodríguez, que mantiene abiertas numerosas causas judiciales contra la concejala de Urbanismo, Aurea Soto.
Precisamente, el abogado de aquéllos, que pleitean en la vía contencioso-administrativa por la expropiación de su parcela, precisa en uno de sus escritos ante esta instancia, que "el Ayuntamiento ha captado que es difícil que un Juzgado de lo Contencioso-Administrativo acepte una reparcelación como la que pretendía realizar (claramente no equitativa), y por ello, recurre a la expropiación "chavista".
Con respecto a la modificación presupuestaria, el regidor, Agustín Fernández, proyecta reunirse, además de con el PP (lo hizo el lunes), con el BNG, previsiblemente con su portavoz, Xosé Somoza, aunque ayer éste no acudió a la comisión de pleno, sino que lo hicieron sus compañeras Susana Díaz y Ximena González; el objetivo es lograr todo el consenso posible para sacar adelante los fondos necesarios para expropiar.
Documentación a estudiar
En este sentido, Rosendo Fernández, portavoz del PP, declaró ayer en una comparecencia en la Diputación que "nós estudaremos con detalle esa modificación e tódolos os informes ao respecto". Pero ya reprochó al alcalde, dijo, "por que motivo no pleno de outubro non nos dixo que caducara o expediente", razón por la que entonces el PP rechazó la modificación ya planteada.
Fernández añadió, por cierto, que hay "gravísimos temas pendientes" que resolver en el Concello. Se refería a las"facturas manipuladas" con tippex, donde augura serios problemas pese a que el gobierno local pidió sendos informes al interventor y al técnico que borró su firma de los recibos.
En todo caso, la reunión, dijo Rosendo Fernández "non é o principio de ningunha amizade. A gran amizade ten que ser coa cidade de Ourense e cos veciños de Ourense". En todo caso, precisó, "os políticos somos os instrumentos para gobernar e quitar os problemas á cidade e aos veciños, cousa que non están facendo. Díxenlle tamén que os orzamentos de 2014 e 2015 tiñan que estar aprobados".
