La UDEV inspeccionó el lugar en donde apareció el cadáver en busca de nuevas pruebas
Agentes de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta (UDEV) de la Comisaría de Ourense capitanean definitivamente la investigación abierta en torno a la desaparición y el homicidio de Socorro Pérez, la mujer de 43 años vecina de O Couto que fue hallada sin vida el pasado sábado en una zona boscosa del Alto del Seminario, tras algo más de un mes desaparecida. Cinco agentes peinaron en la mañana de ayer el lugar donde estaba oculto el cadáver en busca de nuevas pruebas, ampliando el perímetro de la inspección ocular hasta una caseta abandonada próxima. Según parece, sólo hallaron algunos pelos sueltos en el lugar en donde estuvo depositado el cadáver durante 34 días.
Paralelamente, a esa misma hora, los padres de la víctima acudían a la Comisaría para que la Policía Científica les tomase muestras de saliva con las que cotejar el ADN del cadáver, que estaba muy deteriorado, y así lograr la plena identificación. No obstante, la familia ya reconoció las prendas deportivas que llevaba Socorro Pérez cuando salió a correr el 2 de mayo y la llave encontrada junto al cuerpo era la del buzón del piso de O Couto.
Los investigadores, quienes se mantienen cautos amparados en el secreto de sumario decretado por el titular del Juzgado de Instrucción 2 de Ourense, trabajan con la hipótesis que el autor de la muerte conocía a la víctima. Máxime porque en la autopsia no se encontraron señales de lucha y defensa, algo que sí aparecería en caso de que hubiera sido abordada por una persona ajena a su entorno.
Socorro Pérez, tal como confirmó la autopsia, murió a consecuencia de un fuerte traumatismo craneoencefálico con hundimientos de los huesos occipitales y parietales de cráneo.
"Soy pesimista"
La familia, toda vez que ya dio sepultura al cuerpo en la tarde del domingo, se muestra poco esperanzada de que la Policía Nacional llegue hasta el homicida. "Soy pesimista, porque, sin en 34 días no encontró una pista que condujera hasta ella, ahora lo veo más complicado porque se enfrenta a una tarea gigantesca, averiguar todos los datos para dar con el autor de la muerte", explicaba Jesús María Pérez Barreiros, primo de la fallecida. Con la complicación añadida, recuerda, de que Socorro era una mujer con una vida muy ordenada y pautada que ni tan siquiera tenía teléfono móvil con internet .
Pérez Barreiros, en nombre de los padres, expresó su agradecimiento a José Vidal, su hijo Óscar y Francisco Álvarez, amigo del cabeza de familia, ya que con su tenacidad, esfuerzo y compromiso salieron el pasado sábado a buscar a Socorro, como en otras ocasiones, y hallaron el cadáver a 20 metros de la carretera que va al repetidor de televisión del Seminario .
En la tarde de hoy (20,00 horas) está previsto que se celebre la misa y funeral en la parroquia de Fátima. Asimismo, la coordinadora local de la Marcha Mundial das Mulleres convocó a la sociedad ourensana a las 20.30 horas, junto a la Subdelegación del Gobierno, para expresar su repulsa por el asesinato.
