Los centros comerciales de El Corte Inglés y Eroski han atravesado diversas vicisitudes a lo largo de los años que han ido retrasando su construcción. Diversos conflictos con los terrenos han ocasionado demoras que parecían por fin resueltas cuando a finales del año pasado el Concello concedía la licencia a Eroski y en marzo, pocos días antes de que le notificaran la sentencia que anulaba el Plan, hiciera lo propio con El Corte Inglés.
Sin embargo, la situación parece volver a complicarse, particularmente en el caso de Eroski. Aunque El Corte Inglés no se ha pronunciado al respecto, fuentes próximas a la empresa aseguran que está trabajando en el proyecto de ejecución de su centro comercial en la ciudad y que pretende presentarlo en el Concello tan pronto como lo haya ultimado. La urbanización de la Finca Santamarina, sin embargo, todavía no ha comenzado, a la espera -según Flager- de que el centro comercial avance. El recurso presentado por los propietarios de los terrenos para el vial y, sobre todo, la anulación del Plan Xeral podrían afectar la materialización del proyecto.
La repercusión de la situación urbanística de la ciudad y la inseguridad jurídica que plantea es también uno de los argumentos esgrimidos por Eroski para justificar la práctica paralización de las obras de urbanización del ámbito en el que se ubicará su centro comercial. Y es que, según la empresa, aunque el centro comercial tenga licencia, no ocurre lo mismo con los posibles operadores, motivo por lo que esperará una solución al caos urbanístico actual antes de continuar adelante con su proyecto.
Otro de los motivos apuntados por la empresa es la falta de pago de las obras por parte de otros propietarios de la junta de compensación de ese ámbito, principalmente, el propio Concello. Por último, la búsqueda de un socio para financiar el centro comercial -incluso se habló de venta- sería otro de los motivos que estarían detrás de la ralentización de esta superficie comercial en A Farixa.
EN LA ORDENACIÓN PROVISIONAL
Al margen de la situación urbanística, tanto la Finca Santamarina como el área de A Farixa son desarrollos que el Concello ha incluido en la propuesta de ordenación provisional que ha presentado a la Xunta para intentar una solución urbanística temporal en tanto no se apruebe el nuevo Plan Xeral. En este sentido, la institución pública ha alegado el interés general del desarrollo de ambos ámbitos, dado que en ellos, además de las superficies comerciales está prevista también la construcción de equipamientos o bien propiedades municipales que pueden ser enajenadas. La ordenación está en fase de estudio.
La repercusión de la situación urbanística de la ciudad y la inseguridad jurídica que plantea es también uno de los argumentos esgrimidos por Eroski para justificar la práctica paralización de las obras de urbanización del ámbito en el que se ubicará su centro comercial. Y es que, según la empresa, aunque el centro comercial tenga licencia, no ocurre lo mismo con los posibles operadores, motivo por lo que esperará una solución al caos urbanístico actual antes de continuar adelante con su proyecto.
Otro de los motivos apuntados por la empresa es la falta de pago de las obras por parte de otros propietarios de la junta de compensación de ese ámbito, principalmente, el propio Concello. Por último, la búsqueda de un socio para financiar el centro comercial -incluso se habló de venta- sería otro de los motivos que estarían detrás de la ralentización de esta superficie comercial en A Farixa.
EN LA ORDENACIÓN PROVISIONAL
Al margen de la situación urbanística, tanto la Finca Santamarina como el área de A Farixa son desarrollos que el Concello ha incluido en la propuesta de ordenación provisional que ha presentado a la Xunta para intentar una solución urbanística temporal en tanto no se apruebe el nuevo Plan Xeral. En este sentido, la institución pública ha alegado el interés general del desarrollo de ambos ámbitos, dado que en ellos, además de las superficies comerciales está prevista también la construcción de equipamientos o bien propiedades municipales que pueden ser enajenadas. La ordenación está en fase de estudio.
