La Consellería de Sanidade dio por finalizado ayer el traslado al reformado hospital de Piñor de los 50 pacientes de psiquiatría que todavía restaban en Toén. Según explicó la conselleira Rocío Mosquera, se trata de una medida que 'da respuesta a la demanda histórica del sector y de salud mental', tanto de las sociedades profesionales como de las asociaciones de pacientes y familiares.
Las obras acometidas en Piñor, para las que se contó con una inversión de 500.000 euros, han modernizado las actuales infraestructuras de acuerdo con los criterios técnicos de seguridad y humanización de la asistencia psiquiátrica. En este sentido, Mosquera resaltó la apuesta del Sergas por 'sensibilizar á poboación respecto ás enfermidades mentais, con iniciativas como o Proxecto Nise', a través del que se ofrece información y educación sociosanitaria contra el estigma de los trastornos mentales.
Tras las reformas, en el edificio de Piñor continuará el desarrollo de la actividad del servicio de Rehabilitación y Medicina Física, situada en la planta baja, se mantendrá la primera como reserva para Medicina Interna y el resto -segunda y tercera- se dedicarán a las unidades de Saúde Mental.
DEFENSA DE TOÉN
Los trabajadores de los hospitales de Toén y Piñor agrupados en la asociación Pro Sanidade Digna de Ourense (Prosadi) criticaron ayer en un comunicado la reestructuración hospitalaria hecha por el Sergas porque consideran que se perderá una infraestructura sanitaria, además 'del cierre de 71 camas de Medicina Interna'. Estos cambios provocarán, según vaticina Prosadi, un 'colapso de las Urgencias del CHUO por la falta de camas y, en definitiva, la pérdida de calidad asistencial en Ourense'.
Tras las reformas, en el edificio de Piñor continuará el desarrollo de la actividad del servicio de Rehabilitación y Medicina Física, situada en la planta baja, se mantendrá la primera como reserva para Medicina Interna y el resto -segunda y tercera- se dedicarán a las unidades de Saúde Mental.
DEFENSA DE TOÉN
Los trabajadores de los hospitales de Toén y Piñor agrupados en la asociación Pro Sanidade Digna de Ourense (Prosadi) criticaron ayer en un comunicado la reestructuración hospitalaria hecha por el Sergas porque consideran que se perderá una infraestructura sanitaria, además 'del cierre de 71 camas de Medicina Interna'. Estos cambios provocarán, según vaticina Prosadi, un 'colapso de las Urgencias del CHUO por la falta de camas y, en definitiva, la pérdida de calidad asistencial en Ourense'.
